EL PERSONAL DE THE LONDON CLINIC ES INVESTIGADO
Tras la publicación de múltiples teorías acerca de la salud de Kate Middleton y de que eligiera reaparecer en una tienda agrícola cercana a su casa, el hospital donde se operó está en problemas. Su plantilla está siendo investigada por tratar de acceder al historial de la princesa, un hecho sobre el que The London Clinic se ha pronunciado. No consentirán que algo así se pueda repetir en el futuro. La institución se caracteriza por cuidar al máximo la intimidad de sus pacientes y esto pone en sobre aviso a futuros clientes, ya que muchos famosos hasta ahora recurrían a sus servicios. Un portavoz de la clínica dijo a The Mirror: “Creemos firmemente que todos nuestros pacientes, sin importar su estado, merecen total privacidad y confidencialidad con respecto a su información médica”. El mismo medio ha tenido la oportunidad de hablar con alguien cercano a este centro de salud en el que la esposa del príncipe Guillermo fue operada el pasado 16 de enero. “Esta es una violación de seguridad importante y dañina para el hospital, dada su reputación intachable de tratar a miembros de la Familia Real. Los jefes del lugar se pusieron en contacto con el Palacio de
Kensington inmediatamente después de que se les informara sobre el incidente. Todo el personal médico está conmocionado y angustiado por las acusaciones. Están heridos porque un compañero haya podido ser el responsable de tal abuso de confianza y ética”. No dudan ni un momento llegar hasta el final y el culpable será despedido. Unas consecuencias que se esperan y que servirán para aclarar que han cortado con el problema de raíz. Este es precisamente el mensaje que quieren transmitir, ya que son conscientes de que se ha hecho público. Aunque la identidad del trabajador es una incógnita, lo que está confirmado es que la persona en cuestión ha cometido un delito. La Oficina del Comisionado de Información ha recibido un informe en el que se revela la infracción, el cual están evaluando antes de llegar a una conclusión. Es un asunto penal si se tiene en cuenta que no existía consentimiento por parte de Kate Middleton.