Penetración narcoterrorista en las FF.AA.
El megaoperativo ‘Camaleón’ dejó 14 detenidos a escala nacional. Entre los investigados están militares activos.
La Fiscalía general allanó varias dependencias militares en algunas provincias del país, en el marco de una investigación sobre el presunto tráfico de armas, municiones y explosivos que, aparentemente, salpican a miembros en servicio activo de las Fuerzas Armadas.
La ministra del Interior, María Paula Romo, explicó que en una operación, que inició la madrugada de ayer, se efectuaron siete allanamientos en recintos militares en cuatro de las 24 provincias del país.
El Ejército de Ecuador la- mentó la detención de varios soldados involucrados en el caso de presunto tráfico de armas y ofreció su plena colaboración con las investigaciones que adelanta la Fiscalía.
El comandante general del Ejército, el general de División Roque Moreira, en una declaración de prensa en Quito, aseguró que su institución dará “todas las facilidades a las autoridades competentes, como es en este caso la Fiscalía y la Policía nacional, para que realicen todas las acciones legales” sobre el caso.
Recordó que las Fuerzas Armadas de Ecuador tienen normativas y regulaciones precisas sobre el control del material bélico y equipo militar que utiliza.
Los tentáculos de la organización narcoterrorista liderada por Walter Patricio Arízala Vernaza, alias ‘Guacho’, se habrían incrustado en algunos niveles de las Fuerzas Armadas.
Una investigación efectuada por la Fiscalía y unidades de inteligencia de la Policía Nacional revelaron la presunta participación de miembros activos y pasivos del Ejército en un supuesto tráfico de armas, municiones y explosivos al grupo autodenominado Oliver Sinisterra.
A esta disidencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se le atribuye el secuestro y posterior asesinato del equipo periodístico de Diario El Comercio, integrado por el periodista Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y el conductor Efraín Segarra.
También se le adjudica la muerte de Óscar Villacís y Katty Velasco, quienes perecieron en cautiverio en manos de los terroristas, además de al menos una decena de atentados en Esmeraldas.
Este hecho reciente, sin embargo, se suma a una lista de sucesos en que miembros de la Fuerza Pública fueron vinculados con actividades relacionadas con el narcotráfico.
Esto ocurrió en abril, julio, agosto y septiembre, en Esmeraldas, Manabí, Carchi… Incluso un escolta de la seguridad presidencial fue detenido por vinculos con el narcotráfico.
Versión oficial
La ministra del Interior, María Paula Romo, informó que hasta el mediodía de ayer se efectuaron siete allanamientos en Guayas, Pichincha, Esmeraldas y Loja. Según dijo, se recopilaron indicios que podrían servir para la investigación que también se abrió por delincuencia organizada.
En el operativo denominado ‘Camaleón’ se intervino las oficinas de la Comandancia del Ejército en Quito. Personal de la Fiscalía y Policía permanecieron ahí durante toda la mañana sin revelar detalles de la operación.
Romo fue breve en sus declaraciones. Aunque no confirmó que el personal de las Fuerzas Armadas haya tenido nexos con los disidentes de alias ‘Guacho’ para suministrarles armamento militar, la secretaria de Estado tampoco lo desmintió.
Justificó el corto pronunciamiento argumentando que hasta ayer el operativo seguía ejecutándose y que un exceso de información podría entorpecer las investigaciones. La funcionaria aclaró que luego de la audiencia de formulación de cargos que se haga para procesar a los detenidos se podría ofrecer más detalles.
En la operación ‘Camaleón’ se detuvo a 14 personas entre militares y civiles.
Ejército asegura transparencia
En una breve conferencia de prensa, el comandante general del Ejército, Roque Moreira, indicó que la institución ofrecerá transparencia y apoyo a las instituciones encargadas de las investigaciones.
Hizo hincapié en que las Fuerzas Armadas mantienen un control permanente del material bélico, municiones y equipo militar. “Cuando se detectan indicios de algún delito, se ha procedido a remitir a la autoridad competente”, enfatizó.
Moreira recordó que el Ejército ecuatoriano realiza frecuente monitoreo en sus unidades. “Nos duele lo que está sucediendo”, dijo. En esa misma línea, un comunicado oficial reiteraba la política castrense de “cero tolerancia a actividades ilícitas en las que estuviera involucrado personal militar”. Y concluye que “la institución lamenta de sobremanera este hecho que atenta contra los valores de honestidad propios, tradicionales del Ejército y las Fuerzas Armadas”.