Penetración narcoterrorista en las FF.AA.
Hay al menos 14 detenidos a nivel nacional. En Loja fue capturado un cabo primero.
Una investigación efectuada por la Fiscalía y la Policía Nacional reveló la presunta participación de miembros activos y pasivos del Ejército en un supuesto tráfico de armas, municiones y explosivos al grupo autodenominado Oliver Sinisterra.
La ministra del Interior, María Paula Romo, informó que hasta el mediodía de ayer se efectuaron siete allanamientos en Guayas, Pichincha, Esmeraldas y Loja. Según dijo, se recopilaron indicios que podrían servir para la investigación que también se abrió por delincuencia organizada.
En Loja, el cabo primero César B. R., oriundo de la provincia de Los Ríos, fue detenido, ayer, en un cuartel de Loja, por estar vinculado, presuntamente, en la venta de munición al disidente ‘Guacho’, a quien se le atribuye varios crímenes.
En la ciudad de Loja, capital de la provincia de similar nombre, el allanamiento a uno de los tres cuarteles de la localidad, ubicado al suroriente de la urbe, fue ayer, a eso de las 06:30, y deja la detención del cabo primero César B. R.
Ese fue uno de los cuarteles que la madrugada de ayer fueron allanados por varios funcionarios de la Fiscalía General del Ecuador. El operativo se ejecutó en las provincias de Manabí, Guayas, Santo Domingo de los Tsáchilas y Esmeraldas.
“Las armas se compran a la Policía del Ecuador, quienes son los intermediarios de adquirirlas en el paso del Perú y se entregan en la vereda de Puerto Rico y El Pan”, reveló Washington Arroyo, excolaborador de Wálter Arízala, alias Guacho’.
Pérdida de munición
En la localidad la pérdida de una considerable cantidad de municiones llevó a denunciar lo ocurrido a la Fiscalía de Loja. La falta se notó durante una inspección que se hizo a la bodega de material bélico de ese cuartel.
Desde ese momento se sospechó que César B. R., encargado de la bodega de material bélico de la Brigada de Infantería Motorizada de Loja, que está ubicada en uno de los tres cuarteles estaría vendiendo la munición.
La detención de un ciudadano por la terminal terrestre de la ciudad de Cuenca, capital de la provincia del Azuay, el martes primero de septiembre, lleva a los uniformados a realizar una investigación casa adentro.
Operativo ‘Camaleón’
La Unidad de Inteligencia, Contra Inteligencia y Coordinación Transnacional, en el operativo que se denominó ‘Camaleón’ y °Civiles:
Narcisa Q. P., José P.
P., Tarci M. L., Jickson A. G., José O. M., Javier N. H., Martín A. V., Oswaldo B. L. y Alejandro M. O.; y los militares Leonardo M. S., Wálter A. A., Líderson A. A., Luis B. M. y César B. R.
se desplegó en esas unidades militares detuvo a cuatro uniformados: tres cabos y un sargento.
Se presume que el militar habría sido contactado por una red de abastecedores de municiones que sabría vender los proyectiles en el mercado negro en alrededor de cinco dólares de los cerca de 50 centavos que cuesta normalmente.
Los fiscales Lucía Sangurima Erráez y Victoriano Andrade Torres por delegación de la Fiscalía General del Estado, intervinieron en el operativo y al ser una investigación que compromete la seguridad de la Nación no dieron declaraciones.