Tiroteo reabre el debate del porte de armas en EE.UU.
Luego del asesinato de 10 personas en un supermercado de Colorado, Joe Biden, presidente de Estados Unidos, se pronunció sobre el control de armas.
Un día después de que un hombre de 21 años matara a 10 personas en un supermercado con un rifle de asalto AR-15, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reactivó este 23 de marzo el debate sobre el control de armas.
Considerado uno de los temas más intensos y estériles de la política estadounidense, Biden habló finalmente sobre la prohibición del armamento de asalto, un tema que había evitado mencionar la semana pasada, cuando otros tiroteos dejaron 8 muertos en Atlanta.
"No quiero esperar otro minuto, ni otra hora, para dar pasos que son de sentido común y que salvarán vidas en el futuro", dijo Biden, en una declaración a la prensa desde la Casa Blanca.
Pide el veto
Biden pide "prohibir de nuevo las armas de asalto y los cargadores de munición de gran capacidad", en referencia a un veto nacional de ese tipo de rifles que se aprobó en Estados Unidos en 1994, pero que caducó en 2004 sin que el Congreso lo renovara.
También urgió al Senado para que apruebe "inmediatamente" dos proyectos de ley, que ya han recibido el visto bueno de la Cámara Baja, que "cerrarían los vacíos legales en el sistema de verificación de antecedentes" de los compradores de armas.
Sin embargo, es improbable que alguna de esas medidas reúna los 60 votos necesarios para salir adelante en el Senado, donde la estrechísima minoría demócrata debería convencer a 10 republicanos de sumarse a ellos.
"Este no debería ser un asunto partidista, este es un asunto estadounidense, que salvaría vidas, vidas de estadounidenses", recalcó el mandatario.