LA NUEVA OLA

En Ecuador apenas arranca la campaña de vacunación pero, a nivel mundial, las infecciones aumentaron 47% en marzo, luego de haberse estancado en febrero. Con 600 mil nuevos casos de Covid-19 todos los días, la pandemia no ha pasado y el relajamiento del comportamiento social amenaza con llevarse aún más vidas.

Hasta ahora, las olas más violentas de contagio se presentaron en Europa occidental y EE.UU., pero nuevas cepas más contagiosas y más peligrosas para los jóvenes son la causal de que la ‘nueva ola’ -se debate si es la tercera o cuarta-, se expanda con particular violencia en Sudamérica y el sur de Asia.

Desafiando a la OMS, EE.UU., la Unión Europea, Reino Unido y Suiza continúan ejerciendo presión para bloquear la flexibilización de normas de propiedad intelectual que permitirían a laboratorios en países de bajos recursos fabricar vacunas genéricas en grandes cantidades y a menor costo.

El medio financiero Bloomberg advierte de las graves consecuencias que devienen cuando los países ricos pierden interés en buscar soluciones sanitarias para problemas que ya no amenazan su existencia, lo que puede ocurrir una vez que alcancen cierto nivel de inmunidad. Ocurrió con el cólera y la tuberculosis, incluso con el VIH.

Cuidar el sustento de las familias ecuatorianas debe ser la prioridad. Toda medida adoptada debe incentivar comportamientos que conduzcan a una actividad económica prudente y biosegura. El COE Nacional debe ejercer la autoridad con suficiente asesoramiento para contradecir a las autoridades seccionales que, en muchos casos, privilegian el rédito político antes que la seguridad y el sustento de sus ciudadanos.