COVID : E LA RESPONSABILIDAD DEL STADO
Este fin de semana la población esperaba nuevas medidas de confinamiento dictadas por el COE Nacional. Ecuador se encuentra en un pico que supera los peores meses de 2020 en contagios y hospitalizaciones, las unidades especializadas para casos Covid en las casas de salud públicas y privadas operan por sobre su capacidad, escasea el oxígeno y algunas medicinas para tratar las complicaciones de la enfermedad.
La Hora reporta que en los 400 días que cumple la pandemia hoy, solo dos universidades privadas han secuenciado apenas 346 muestras del virus, muy por debajo de otros países de la región. El costoso proceso permitiría diagnosticar qué variantes predominan en ciertas zonas, guiando medidas acertadas y eficientes.
El Estado no ha invertido en desarrollar la capacidad de proveer pruebas de diagnóstico a menor precio; el costo de la prueba PCR es prohibitivo para la gran mayoría de ecuatorianos. En ciudades como Ambato, el ministerio de Salud ya no realiza pruebas PCR por “falta de insumos”. No existe un protocolo de ‘testeo’ para determinar el cerco epidemiológico de un paciente contagiado. En Quito, la Secretaría de Salud del Municipio asegura hacer 400 pruebas diarias, el mismo número que anuncia desde 2020.
Tras un año de pandemia, resulta insólito que la reacción de las autoridades sea un nuevo ‘confinamiento light’, con medidas improvisadas que se basan en información incompleta.
El país merece respuestas y acciones concretas; merece inversión pública en herramientas que generen información clara para tomar decisiones y asegurar, en el corto y mediano plazo, una fuente de sustento para nuestras familias.