PARA ELLAS, EL VINO SÍ ES UN AFRODISIACO
ALIMENTOS COMO LAS OSTRAS O LA CANELA SON FAMOSOS POR MEJORAR LA LIBIDO. UN SEXÓLOGO ACLARA QUÉ HAY DE MITO Y DE REALIDAD EN ELLO.
CHOCOLATE, miel, ostras, canela, higos… La lista de los llamados afrodisiacos es larga. ¿Pero realmente influyen en el deseo o desempeño sexual? Vicente Briet, psicólogo clínico y especialista en sexología, dice que ningún alimento, por sí mismo, incrementa el deseo sexual ni en hombres ni en mujeres. No hay evidencias científicas.
Briet, miembro de la Sociedad Internacional de Especialistas en Sexología, aclara que los mitos de alimentos afrodisiacos se basan en que las vitaminas o ciertos minerales refuerzan o estimulan la función o el deseo sexual.
Pese a lo que dice Briet, la Universidad de Florencia en un estudio con mujeres de entre 18 y 50 años sin problemas sexuales, demostró que el vino tinto puede actuar como afrodisiaco porque aumenta el deseo sexual en la mujer. Los estudiosos notaron que uno o dos vasos de vino aumentan el deseo sexual porque, según esa hipótesis, el vino tinto eleva el flujo sanguíneo hacia zonas clave del cuerpo como los genitales. Por eso no solo aumenta la libido, sino que actúa sobre la satisfacción sexual. Se puntualiza que los antioxidantes del vino podrían beneficiar a las paredes de los vasos sanguíneos, ensanchándolos y aumentando el flujo de la sangre.
De lo psíquico a lo físico
La ciencia no ha probado los efectos afrodisiacos físicos de ciertas sustancias, pero no significa que no sean eficaces. Muchos especialistas opinan que de por sí, la mayoría de alimentos no son afrodisiacos. La textura, olor, sabor, forma de presentarlos, evocan una relación con la sexualidad. Y aunque un alimento afrodisiaco incida a nivel subjetivo, esa reacción libera una hormona (polipéptido intestinal vasoactivo) y provoca vasodilatación no solo del sistema digestivo, sino de los cuerpos cavernosos de los genitales.