Shirting: La tela de camisa las viste a ellas
EL CLIMA, EL ESTILO DE VIDA Y LA EDAD DETERMINARÁN SU USO EN NUESTRO GUARDARROPA, CON ESTILISMOS CASUALES, DEPORTIVOS Y ELEGANTES.
EL TEJIDO que siempre fue destinado a las camisas de hombre rompe la tradición y reaparece innovador y con guiños de osadía femenina en prendas de diseños modernos y elegantes, adaptables al clima tropical y fáciles de combinar.
‘Shirting’ es el término que utiliza el mundo de la moda para designar a las telas para camisas masculinas. Sin embargo, el tiempo, la evolución de la moda, así como la actitud más liberada y arriesgada de la mujer, han obligado a extender ese significado para hacer referencia a una tendencia femenina.
Las prendas confeccionadas en telas tipo oxford, algodón y popelina, que inicialmente se orientaban hacia el mercado de diseño de uniformes, en la actualidad se hacen presentes en diversos tipos de materiales y diseños vanguardistas, que nos permiten abrir el abanico de posibilidades creativas en un clima tan variable como el nuestro.
Las prendas que posean mayor porcentaje de algodón que elastano, siempre tendrán como ventaja la rápida absorción de la humedad, resistencia al calor y un fácil mantenimiento, asegura la asesora y estilista de mo- da Renata Morán Karolys.
La experta afirma que la transformación que se ha observado en las prendas básicas femeninas durante las últimas temporadas demuestra que el uso del tejido para camisa no tiene limitantes y se entroniza en el diseño de vestidos, faldas de corte asimétrico, pantalones con pliegues, shorts, maxivestidos, camisas con vuelos y camiseras, que se han paseado tanto en las pasarelas como en el street style a nivel mundial.
La tendencia ya está presente en marcas internacionales y en el mercado nacional con diseños exclusivos, como Stella & Amelia, de Yoli Neme; D’vro, de Verónica Uribe; Macchiavellica, de Nena Macchiavello; entre otras, quienes han apostado por la elegancia y versatilidad de esta nueva tendencia.
La asesora recomienda conocer su tipo de cuerpo y adaptar la prenda de la forma que más le favorezca. No hay nada prohibido, hay que saber cómo y dónde llevarlo.