Alejandra Gómez * semana@granasa.com.ec

EXISTE la creencia antigua de que cada eclipse trae al planeta y a sus habitantes cambios y transformaciones impulsadas por crisis y movimientos internos tanto a nivel personal como grupal. Y este mes viene recargado, ya que no uno sino dos eclipses nos acompañarán, el 14 y el 28 de octubre, convirtiéndose en un mes activador de eventos que movilizará grandes cambios.

El espectacular anillo de fuego

Durante el eclipse solar de este 14 de octubre, la luna se observó más distante de la Tierra que durante el eclipse total, lo que hizo que esta se vea más pequeña y no cubra toda la superficie del Sol, proyectándose un hermoso anillo de fuego, dejando visible solo un círculo del astro rey.

Es posible que en determinados países, durante el paso de este fenómeno usted haya sentido que la temperatura disminuyó cuando el sol se bloqueó y haber experimentado que el calor regresa cuando pasó la Luna. Aunque por nuestra localización, no se siente tanto esa diferencia climática.

Sus efectos

Este eclipse, que trae energías intensas, grandes movimientos y cambios para todos los signos del zodiaco, tuvo lugar en el signo de libra, activando el deseo de mejorar las relaciones con los demás con equilibrio y armonía. Es un tiempo en el que se buscará mayor justicia e igualdad por los demás así como un deseo intenso de cortar con toda conexión tóxica, despojándose de esos vínculos narcisistas, unilaterales o egoístas para dar paso a relaciones recíprocas o armoniosas, ya sea en el campo laboral o personal.

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