Mecanica Aprenda lo básico
Si en algún momento está en apuros, no se estrese. APRENDA TIPS BÁSICOS sobre cómo mantener en óptimas condiciones su vehículo.
Si usted maneja, lo más seguro es que el carro le haya fallado cuando menos se lo esperaba. Ya sea porque ignoró un sonido raro o una de las señales que provenía del tablero. Para evitar encontrarse en esta penosa situación, el ingeniero automotor Walter Vera recomienda hacerle al auto “un mantenimiento preventivo y no esperar a que el carro se le dañe porque el costo será mucho más grande”.
El experto comparte información básica sobre cuáles son las partes más importantes del vehículo que siempre deben estar en buen estado.
PARTES BÁSICAS
Batería: Es fundamental que se mantenga en buen estado porque sin ella el vehículo no se prende. Cerciórese de que “los bordes estén bien ajustados, porque de lo contrario puede ocasionar un mal arranque”, enfatiza el experto.
Llantas: Son las que lo van a llevar a cualquier lado, pero lo mejor es que las adquiera en un sitio seguro, de confianza. Para saber cuáles son las que están en buen estado fíjese en la fecha de fabricación: los dos primeros dígitos son el número de la semana en que se elaboró y los dos siguientes son el año. Su tiempo útil es de 4 años. Evite adquirir las que tengan un año de vida sin utilizar.
Radiador: Esta pieza es el elemento vital del sistema de enfriamiento. Ya que con el refrigerante absorbe el calor del motor, lo que evita un sobrecalentamiento. Un radiador que esté en condiciones óptimas no consume líquido. Si esto sucede puede ser una alerta y necesite de la ayuda profesional para repararlo.
El motor: Esta zona del auto requiere de aceite lubricante para funcionar. Al conseguir aceite para su carro es un error pensar que este debe cambiar su densidad cuando envejece. Si lo hace, el motor se va a demorar más en lubricarse y lo más seguro es que varias piezas se desgasten más rápido de lo que piensa.
Frenos: Sea precavido, si el aviso de freno de mano se enciende en el tablero, lo más probable es que el líquido de frenos esté bajo, pero, mucho cuidado, volver a llenarlo no es la solución. Lo mejor es acudir a su mecánico de confianza porque es una señal de que las pastillas se están desgastando.