Piden CCR audite contrato que Alcaldía S. S. dio a AGM
Diputados de ARENA señalan posibles irregularidades en proceso que terminó en millonario contrato firmado por Nayib Bukele.
Cinco diputados del partido ARENA acudieron ayer a la Corte de Cuentas de la República (CCR) a solicitar que se realice una auditoría al proceso de licitación y adjudicación del proyecto para el cambio de luminarias de mercurio a tecnología led que la Alcaldía de San Salvador le entregó a la empresa de origen colombiano AGM Desarrollo, S. A. de C. V. mediante un contrato firmado por el alcalde Nayib Bukele.
“Estamos pidiendo a la Corte de Cuentas que analice por qué no hubo una precalificación en este proceso licitatorio y por qué se hizo de manera tan secreta, cuando este es un proceso licitatorio de $24 millones que debió estar abierto al público”, señaló el diputado René Portillo Cuadra.
El contrato firmado por Bukele y la empresa AGM Desarrollo, S. A. de C. V. tiene una vigencia de 20 años, y es parte de los tres que la empresa tiene con alcaldías del Área Metropolitana de San Salvador.
Para los diputados de ARENA, la petición que hacen a la Corte de Cuentas se basa en el interés de los capitalinos de conocer si la adjudicación del proyecto a AGM Desarrollo, S. A. de C. V. cumplió con los requisitos que establece la Ley de Adquisiciones y Contrataciones de la Administración Pública (LACAP).
“Lo más importante es ver si las reglas que establece la LACAP en cuanto a la licitación transparente se cumplieron en este proceso que ha liderado el señor Nayib Bukele como alcalde de San Salvador”, agregó Portillo Cuadra.
La Fiscalía General de la República (FGR) ya inició una investigación de oficio por los contratos que AGM Desarrollo y las tres alcaldías tienen. El fiscal general, Douglas Meléndez, anunció que la investigación busca determinar “si ha habido actos de corrupción” en las adjudicaciones.
LOS SEÑALAMIENTOS
Aparte de conocer si se cumplieron los requisitos de la LACAP, los diputados de ARENA consideran que se pudieron cometer otras siete irregularidades más en el proceso de licitación y adjudicación del contrato por $24.2 millones.
Los funcionarios piden a la CCR que determine si hubo precalificación por parte de la comisión que se encargó del proceso, que se compruebe la solvencia económica y experiencia de la empresa en proyectos similares, así como las razones por las que se desestimó a otras empresas que participaron en el proceso.
También piden que se indague si hubo un estudio técnico que respalde que se tendría ahorro en factura energética, si la ejecución del proyecto se cumple con lo establecido en el contrato y si en la comisión de evaluación de las propuestas hubo familiares del alcalde Bukele involucrados. De acuerdo con documentos de la alcaldía, en dicha comisión sí está un familiar del jefe de comuna: Jorge Miguel Kattán Readi, tío del alcalde.
Para el diputado David Reyes, existen los elementos suficientes para que la Corte de Cuentas realice la auditoría que están solicitando. Incluso los legisladores hicieron eco de los señalamientos que diferentes medios colombianos hacen sobre los procesos judiciales que enfrenta el fundador del consorcio al que AGM Desarrollo, S. A. de C. V. pertenece en ese país.
“Los ciudadanos estamos cansados de que en la gestión pública existan esos amigazos, esos compadrazgos a la hora de dar contratos. Es incorrecto, no es ético favorecer, irrespetando todos los procesos que la LACAP establece, a amigos o compadres; por eso es que la ley debe aplicarse. Por eso estamos solicitando que la Corte de Cuentas audite, determine y nos deje claro si estas irregularidades se han dado”, expresó Reyes.
Los diputados consideran que el tema de los procesos judiciales que enfrenta el fundador del consorcio Unión de Personas Consorcio AGM Desarrollo, con base en Colombia, “es motivo suficiente” para que se pueda dar por finalizado el contrato.
“Que la Corte de Cuentas haga lo que corresponde e investigue cómo se dio esta adjudicación que a todas luces muestra que no está bien”, agregó la diputada Ana Vilma de Escobar.