Motos acuáticas sin regulación en el lago
También dan su aporte a la contaminación del cuerpo de agua.
El lago de Coatepeque, en los municipios de El Congo y Santa Ana, es propicio para que amantes de las motos acuáticas disfruten de la belleza natural que regala el lugar. Pero esta actividad recreativa se ha convertido en problema para el lago y para los turistas. Las motos acuáticas pueden ser alquiladas por cualquier persona, sin ninguna regulación para controlar el tránsito de estos vehículos en el lago. Residentes dan fe que menores de edad e incluso ebrios manejan estas máquinas. Una familia se puede estar bañando tranquilamente, pero el peligro está cerca, por una mala maniobra o un desperfecto mecánico.
Cada fin de semana, principalmente, los propietarios de estos vehículos los ofrecen a quienes visitan los restaurantes ubicados a la orilla del espejo de agua o sobre este. El servicio regular va desde los $5 los cinco minutos a periodos de 15, 30 y hasta una hora o más, depende de la negociación.
El problema es que no hay ningún control sobre este medio de diversión, las motos acuáticas no poseen matrícula ni número de registro y queda a discreción del dueño del vehículo a quién se lo alquila, incluyendo a menores de edad y personas en estado de ebriedad, lo que ya ha provocado accidentes en la zona.
“Se la alquilamos a quien nos pague, como manejar estas motos no es difícil no se requiere licencia, solamente les explicamos dónde se enciende y apaga, cómo se acelera y listo. Les decimos que tengan cuidado y les damos un chaleco de seguridad por si sucede un accidente, pero nunca se ha dado”, afirmó alguien que alquila los aparatos.
El encargado del puesto de la Policía de Turismo (POLITUR) del lago, cabo Sándor Colocho, señaló que como autoridad no pueden impedir el arrendamiento de dichas motos, ya que no hay ninguna ley que las regule, por lo que únicamente se limitan a dar recomendaciones a los propietarios de estas, para que tengan cuidado con las personas a las que les alquilan.
“No hay una ley que regule, deberían de estar registradas. En este caso de las jet ski (sic) todavía se está pasando por alto, no tienen registro; ese es un bien privado, no podemos decirle mire no la alquile, no se puede, tal vez se le puede hacer una observación”, dice el agente. Esta situación irregular también se incluiría en la ordenanza que está preparando la Fundación Coatepeque, para que el arrendamiento de motos acuáticas sea regulado y así se puedan evitar situaciones que lamentar.
No fue posible confirmar con la Alcaldía de El Congo, en cuya jurisdicción se ubican las zonas donde se alquila la mayor cantidad de motos acuáticas a los turistas, si hay alguna propuesta para regular esta actividad.
Durante la temporada alta de visitas, solo en el restaurante más grande que hay en el área de los comedores populares se pueden reunir hasta 15 motos acuáticas de arrendamiento, cuyos dueños también andan de negocio en negocio ofreciendo el servicio.
SU APORTE A LA CONTAMINACIÓN
Además del riesgo que representa alquilar estos vehículos a cualquier persona, las motos también dan su cuota de contaminación al agua del lago, ya que despiden combustible y aceite que va a parar al cuerpo de agua donde se realizan actividades de pesca y recreación.
Parece ser que el lago, considerado una de las nuevas maravillas naturales del mundo, tiene muchas fuentes de contaminación, incluyendo los desechos y aguas grises que producen algunos locales, que pueden hacerlo salir de la lista de los mejores destinos turísticos del país, lo cual afectaría a las comunidades locales, ya que se dejarían de generar fuentes de empleo.