Asesinan en Izalco a dos primos cuando regresaban de una milpa
Más de 100 personas han muerto de forma violenta durante este año en ese municipio.
Tres primos retornaban ayer de realizar labores agrícolas, cuando fueron atacados por pandilleros en el interior de unos cultivos de caña. Dos fueron asesinados y el tercero logró escapar herido. Los fallecidos fueron Edwin Alfredo Hernández Ramírez y Cristian David Cerén Ramírez, ambos de 16 años, mientras que otro pariente, de 17, fue lesionado con arma blanca por los delincuentes.
Los tres primos, que según su familia se dedicaban a labores de albañilería y a la agricultura, fueron atacados por presuntos pandilleros cuando regresaban de chapodar una milpa de un pariente ubicada en el lugar conocido como Cerro Partido, al otro lado de la carretera que de Sonsonate va a San Salvador.
Según la Policía Nacional Civil (PNC), el doble crimen ocurrió ayer a las 9:30 de la mañana dentro de un cultivo de caña de azúcar ubicado en la hacienda y cantón El Sunza, de Izalco (Sonsonate). Vivían en el caserío El Carmen, del mismo cantón.
Los menores se encaminaban en medio de un callejón cultivado con caña y maíz a ambos lados cuando les salieron al paso varios pandilleros que les ordenaron pararse y les quitaron las cumas con que habían quitado la maleza de la milpa.
Luego fueron obligados a meterse al cultivo de caña donde los atacaron con sus mismas armas blancas, uno de ellos logró escapar herido de las manos y llegó a la casa de su familia, donde les co- mentó que habían sido atacados en el cañal y que desconocía la suerte de sus primos.
La PNC fue informada del hecho y trasladó al herido al hospital de Sonsonate, mientras que al rastrear la zona localizaron más tarde los cadáveres de los otros dos menores.
El militar fue identificado por la policía como José Alfredo Fuentes, de 28 años, quien tenía tres años de estar de alta en la guarnición de la institución armada en ese departamento.
Según las primeras investigaciones en el hecho habrían participado entre uno y dos pandilleros del sector. De acuerdo con el reconocimiento del cadáver, Fuentes tenía tres impactos de bala calibre 38 milímetros; dos lesiones en el tórax y otra en la cabeza.
El comandante del DM-3, Carlos Tejada, confirmó que Fuentes había sido amenazado por pandilleros el año pasado, por lo cual interpuso la denuncia; sin embargo, decidió seguir viviendo en el sector, pues sintió que la presencia de pandillas había disminuido en la zona.
Mientras que en el Hospital de Nueva Guadalupe, San Miguel, murió José Luis García, de 37 años, luego de haber sido atacado a balazos por pandilleros en el cantón La Cruz 1, municipio de Chinameca, en el interior de su vivienda.
De acuerdo con los parientes de las víctimas, estas ya no estudiaban y se dedicaban a ganarse la vida en albañilería y labores agrícolas. La inspección de la escena del crimen fue realizada en la tarde. La policía montó un operativo en busca de los criminales, pero no logró capturarlos.