PAÍS ESPERA CON CAUTELA FUTURO DE SUS MIGRANTES
El tema de migración está al centro de la relación de El Salvador con la nueva administración de Estados Unidos.
La llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos mantiene en vilo a miles de salvadoreños que viven sin documentos en Estados Unidos y sus familias. El tema no fue ajeno para algunos políticos salvadoreños, quienes esperan que no se pierdan los beneficios migratorios para ciertos compatriotas.
El presidente de la Asamblea Legislativa, Guillermo Gallegos, reaccionó a la investidura del republicano y dijo que espera que el nuevo presidente pueda mantener los beneficios para los compatriotas en Estados Unidos, como el Estatus de Protección Temporal (TPS, siglas en inglés).
El TPS cobija a unos 190,000 salvadoreños en esa nación que pueden trabajar bajo la medida temporal. Además, Gallegos declaró ayer a la Televisión Nacional que espera que El Salvador siga adelante con “la buena relación” que ha tenido con administraciones pasadas en el país aliado.
Agregó que “cree” que Trump mantendrá la misma línea que han tenido sus antecesores respecto a América Latina. “Estados Unidos fue, es y será un país de migrantes”, sentenció.
Para Mario Ponce, jefe de fracción del Partido de Concertación Nacional (PCN) en la Asamblea Legislativa, “Estados Unidos necesita” a El Salvador como país “de paso de migrantes” y además evalúa que “la seguridad de Estados Unidos pasa por lo que sucede acá”.
Roberto Rubio, director de la Fundación para el Desarrollo Económico (FUNDE), expresó que “ya no habrá un (Joe) Biden” en la administración Trump. Biden había sido el puente entre el gobierno de Barack Obama y Centroamérica.
“En materia de política exterior quizás no habrá tanta preocupación por Centroamérica como lo