La arrocera San Francisco acumula $18 mill en pérdidas
Los balances financieros de la empresa revelan que desde 2012 no ha obtenido ganancias. Pasó a formar parte del Grupo Alba en 2014.
La Arrocera San Francisco acumuló entre 2012 y 2015 pérdidas que ascienden a $18.2 millones, según los balances financieros que la empresa ha presentado al Registro de Comercio y que fueron consultados por LA PRENSA GRÁFICA. La Arrocera San Francisco se dedica al cultivo, beneficiado y comercialización de arroz, entre otras actividades. La empresa fue fundada en 1975 con un capital social de 400,000 colones. A principios de la década era subsidiaria de Grain Hill Corporation, S. A., una firma domiciliada en Panamá. A finales de 2014, la arrocera capitalizó pasivos a favor de Energía Orgánica, S. A. de C. V. (ENERGOR), por un valor de $4,170,880. En febrero de este mismo año, ya había capitalizado otros $2 millones. De esta manera, ENERGOR se hizo con el control accionario de Arrocera San Francisco. ENERGOR, empresa dedicada a la compra y venta de combustibles, según su acta de constitución, es parte del conglomerado de Grupo Alba, según publicó en 2014 el periódico digital El Faro. De acuerdo con el informe de auditoría externa de 2015 remitido al Registro de Comercio en 2012, la arrocera perdió $2.7 millones; en 2013 las pérdidas fueron de $5.6 millones; un año después bajaron a $3.5 millones. Para este año reconocieron una pérdida, originada por una utilidad que esperaban recibir, pero que al final no se concretó, en venta de arroz granza (sin procesar) a un cliente de Venezuela. Para cerrar en 2015, último año reportado en el registro, con $6.3 millones en pérdidas. En dicho informe, la firma auditora advierte: “La sociedad presenta pérdidas acumuladas por un total de $18,227,119.57, monto que constituye el 98.03 % del capital social. Esta condición indica la existencia de una incertidumbre de importancia relativa que podría proyectar una duda importante sobre la capacidad de la sociedad para continuar como negocio en marcha”.
La auditora hizo referencia a que las sociedades de capital se disuelven cuando se registra la “pérdida de más de las tres cuartas partes del capital, si los accionistas no efectuaren aportaciones suplementarias que mantengan, por lo menos, en un cuarto el capital social”, según el artículo 187 romano III del Código de Comercio. Ese año, el patrimonio de la arrocera fue de $2.4 millones, que al ser sumados con los pasivos llegaron a $24.6 millones.
Esta misma situación fue subrayada en el informe de auditoría correspondiente a 2014.
PLAN DE RESCATE
En 2015, según indican las copias de los informes, Arrocera San Francisco se comprometió a implementar una estrategia para revertir los malos resultados. En uno de los puntos se dijo que se capitalizaron $3.7 millones de la cuenta por pagar a ENERGOR, S. A de C. V., principal accionista.
Se dijo, además, que se iba a “a rentabilizar” los activos propiedades de la arrocera como terre-
nos, entre ellos, unas bodegas ubicadas en Soyapango; Agroindustrias Centroamericanas, S. A. de C. V., Harinas de Centroamérica, S. A. de C. V. (HADECA) y las instalaciones del centro de distribución de San Miguel.
Otra medida era enfocar la gestión de venta al arroz y al frijol mediante la tecnificación del beneficio El Rosario, para lo cual se compraría financiamiento y así comprar maquinaria “sofisticada”, con ellos se lograría más eficiencia en la producción y mayor rentabilidad. Otra iniciativa iba encaminada a obtener un mejor precio por el frijol para lo cual se buscaría hacer una compra “en volumen trimestral”, y con ello mejorar el margen de utilidad.
Se propuso cambiar la representación de las marcas que no eran rentables por otras que sí lo fueran. La empresa consideró, asimismo, mejorar y transformar sus procesos internos, para lo cual la junta directiva autorizó la compra de nuevos sistemas informáticos con un plazo de nueve meses para su implementación y desarrollo.
El plan incluía además la inyección de $1.6 millones por parte del principal accionista de la sociedad. “En resumen, el plan global consiste en que para el cuatro trimestre de 2016 se estarían obteniendo un mínimo de utilidades y obtener éxitos en 2017”, indica el informe. La empresa aún no ha presentado el balance financiero de 2016.
Antes de pasar a manos de ENERGOR, la arrocera ya había registrado pérdidas por $2.6 millones en 2011 y ganancias por $1.2 millones en 2010. El año 2009 tampoco fue bueno, pues el negocio perdió $1 millón y en 2008 obtuvo $758,251 en utilidades. La semana pasada se conocieron los problemas financieros de VECA, otra empresa ligada a Grupo Alba, por un crédito de $14 millones.