Afirman que no ven pagos reflejados en obras

La limpieza de las calles de la ciudad de San Vicente, la recolección de los desechos sólidos y el alumbrado público, entre otros servicios municipales, son bien vistos por algunos residentes, pero a la vez resienten que sus tributos no se ven reflejados en obras de beneficio para la comunidad; de hecho, cuestionan que la planilla de empleados que tiene la alcaldía posea algunas plazas que “no son necesarias y solo aumentan la carga administrativa”. “Para mí están bien algunos servicios, aunque podrían mejorarse. Mi mamá siempre pagó y nosotros hemos seguido cancelando, pero desde que yo recuerdo aquí en el barrio son mínimas las mejoras que ha hecho la alcaldía, y no solo aquí, en toda la ciudad... entonces, uno se pregunta qué hacen con los impuestos, en qué los invierten”, cuestionó Marta Rivas Carballo, mientras señalaba el mal estado de la calle que va del barrio El Calvario a la colonia Agua Caliente. “Ahí (en la alcaldía) hay un montón de gente que no hace mayor cosa, los ve en la calle uniformados y pareciera que algunos no andan desempeñando el trabajo que supuestamente deben, les pagan de lo que nosotros cancelamos, pero no se ven los frutos, la ciudad tiene necesidades”, agregó la vicentina. De acuerdo con el alcalde Medardo Hernández Lara, los ingresos por impuestos y tasas municipales se utilizan para pagar empleados y brindar apoyo en pequeñas colaboraciones a las Asociaciones de Desarrollo Comunal (ADESCOS). También considera que si todos los contribuyentes estuvieran solventes, sí podrían ejecutar obras más grandes. “Con los fondos propios se paga a los empleados, también se apoya a las comunidades en compras de sillas, celebraciones que hace la ADESCO, y otras pequeñas ayudas, porque lo que estamos recibiendo no da para más”, señaló. Los ingresos de fondos propios en la Alcaldía de San Vicente en los últimos siete años se han mantenido en un promedio que supera un poco $1 millón, que de acuerdo con la Unidad Tributaria Municipal (UTM) se detalla de la siguiente manera: solo en ingresos por tasas en 2010 fueron $1,044,242.72, en 2011 subieron a $1.2 millones, en 2012 totalizaron $1.1 millones, durante 2013 se percibió lo mismo pero en 2014 un poco más de $1.2 millones, mientras que en 2015 fueron $1.4 millones y el año pasado –hasta septiembre–, $1.1 millones. Estos ingresos son por mucho superiores a los recolectados en impuestos, cuyo comportamiento ha sido de alzas y bajas; por ejemplo, en 2010 ingresaron $429,197.31, en 2011 fueron 387,286.58, en 2012 llegaron a $637,175.15, en 2013 totalizaron $725,696.17, el siguiente año sumaron $649,562.25, en 2015 se cerró con $687,669.92, y el año pasado –hasta septiembre– se había percibido $438,716.01. En el documento de rendición de cuentas de la Alcaldía de San Vicente de mayo 2015-abril 2016 se destaca el subsidio que se entrega a los vicentinos en algunos servicios. En el caso de aseo y disposición final de desechos sólidos, refleja que el total cancelado fue de $836,416.79, subsidiando $442,763.12, el 53 % que eroga la municipalidad. En alumbrado público lo pagado por la comuna fue de $253,842.74, de los cuales subsidió $142,580.56, 56 %, según lo informado. El alumbrado en mercados también le representa una carga a las arcas municipales, pagando $79,593.97, con subsidio de $52,367.97, o sea, el 66 %.