Participación de la mujer en mercado laboral es limitada
Los datos señalan que muchas mujeres no buscan trabajo por los quehaceres domésticos, actividad invisibilizada por la falta de remuneración económica.
DE QUIENES NO BUSCAN EMPLEO SON MUJERES.
La participación de las mujeres en el mercado laboral se encuentra limitada por las tareas en el hogar, según las cifras que arroja el informe de Análisis Socioeconómico de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) y la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples (EHPM) de 2015, última versión disponible. La UCA señala que el servicio doméstico es la rama de actividad económica en la que la proporción de las mujeres trabajando en relación de los hombres es mayor. Específicamente, 14 mujeres por cada hombre. El dato “refleja un carácter estructural, pues en un período de 17 años no se perciben cambios sustanciales en la composición laboral por rama de actividad económica”, señala la universidad. Al observar el análisis por “categoría ocupacional”, las mujeres superan a los hombres en servicios domésticos y como trabajadoras por cuenta propia.
“Existe una vinculación entre la mayor participación de las mujeres en la rama de comercio y en la categoría ocupacional por cuenta propia. Por ejemplo, para 2014, el 52 % de las mujeres comerciantes estaba empleada por su propia cuenta. Asimismo, más del 10 % de todas las mujeres ocupadas lo hace en servicios domésticos. Esto muestra que la fuerza de trabajo femenina entra al mercado laboral a empleos con bajos salarios, sector informal y nula o precaria seguridad social”, dice el informe.
Por otra parte, la EHPM señala otra desigualdad. De 10 mujeres que están “fuera de la fuerza laboral”, siete señalan que no están buscando empleo fuera de casa por los quehaceres domésticos, solo el 14.6 % cita como razón los estudios. En contraste, el 41.9 % de los hombres dice no estar tratando de conseguir un trabajo porque están estudiando. La encuesta también revela que la Población Económicamente Inactiva (PEI) se compone en un 76 % de mujeres. Este grupo refiere a las personas que están en edad de trabajar pero que ni lo están haciendo, ni buscando.
En su análisis la UCA señala: “La inactividad es concebida en función de la economía monetaria, y solo consideran activas a aquellas personas que reciben un pago por las actividades que realizan. Las labores del cuidado quedan invisibilizadas al ser denominadas inactividad por dedicarse a servicios domésticos no remunerados”.
Es decir que, muchas mujeres no están buscando empleo por la carga de actividades domésticas, y de las que sí trabajan fuera de casa, muchas lo hacen en el sector de servicios domésticos o por su cuenta.
“En la sociedad salvadoreña, la reproducción de las familias no depende únicamente del salario, sino también de la economía del cuidado, la cual es ejercida, casi de manera exclusiva, por las mujeres y provee a los hogares de bienes y servicios para sostener la vida. Sin embargo, esto no se considera como trabajo ni como actividad productiva”, concluye el análisis de la Universidad Centroamericana.
DESPROTECCIÓN LAS MUJERES TRABAJAN MÁS COMO COMERCIANTES POR CUENTA PROPIA Y EN SERVICIOS DOMÉSTICOS. AMBOS SECTORES CON UN ALTO NIVEL DE INFORMALIDAD, ES DECIR, FALTA DE PROTECCIÓN SOCIAL Y TRIBUTACIÓN.