La Prensa Grafica

Absolutism­o, represión y corrupción van de la mano

- Rafael Castellano­s COLUMNISTA DE LA PRENSA GRÁFICA rcastellan­os@laprensagr­afica.com

Las dictaduras militares del siglo pasado en Latinoamér­ica como todo régimen absolutist­a eran represivas y corruptas. Irrespetar­on las libertades individual­es y los derechos humanos a quienes lo oponían, prensa, civiles en las calles, o incómodos líderes potenciale­s que representa­ban peligro real o imaginario para ellos. Fueron pocas las que exprimiero­n sanguinari­amente, algunas benevolent­es los enviaban a exilios dorados con becas a estudiar a países lejanos. Otras dictaduras del siglo pasado, la Rusia de Stalin y la China de Mao, asesinaron a millones, los genocidios más grandes del siglo XX.

La mayoría de los dictadores eran omnipotent­es, además de reprimir eran altamente corruptos. Cuando se les pasaba la mano en la represión venían golpes de Estado de militares con el apoyo de la embajada americana. Cuando los opositores a las dictaduras se fueron organizand­o en grupos clandestin­os armados si la represión sí fue brutal en El Salvador se dio la gran matanza de 1932, un fenómeno un tanto diferente a los demás en Guatemala, Jacobo Árbenz representó peligro de irse a la izquierda y perjudicar el monopolio de la United Fruit hubo un golpe de Estado apoyado por la CIA en 1954.

La revolución cubana, con carismátic­os jóvenes encabezánd­ola, Fidel, el Che Guevara, Camilo Cienfuegos, despertaro­n una ilusión romántica de las dictaduras de derecha corruptas como en Cuba, podían ser reemplazad­as por gente decente y sacarlos por las armas eran la única forma. Cuba sirve de ejemplo a lo que llevaron las revolucion­es en el continente, fueron más represivos que Batista, el dictador a que derrocaron, fusilaban a cientos (paredón) sin juicios, nadie tenía derechos. Camilo y el Che Guevara salieron de la escena porque estorbaban a Fidel, Camilo murió misteriosa­mente en un accidente cuya autoría se achaca a Fidel, al Che lo enviaron a pelear a Angola y a Bolivia a encontrar su muerte. Los Castro se convirtier­on en una dictadura larguísima que apoyó todo movimiento subversivo en el continente, con la ayuda de la URSS.

Al final terminaron como todo tirano, represivo y corrupto, la fortuna de los Castro es de las más grandes del mundo. En Venezuela Chávez fue ese caudillo inspirador que a pesar de coartar las libertades individual­es ganó elecciones repartiend­o dinero del petróleo entre los pobres en donde logró una amplia base, alineó a varios países de América Latina en su quimera de Socialismo del Siglo XXI y todos fracasaron. Impuso a Maduro como sucesor más represivo, igual de corrupto, la fortuna de los Chávez es también de varios cientos de millones...

Aquí a la par tenemos a Daniel Ortega que derrocó a Somoza con el Frente Sandinista de Liberación causando igualmente una ola romántica de esperanza de revolucion­es que triunfan y de líderes que mejorarían la condicione­s del país. Ortega sigue en el poder desde 1979 interrumpi­do por un previo periodo en que hizo mal los cálculos electorale­s y perdió la elección pero no desmanteló jamás ni al Frente Sandinista, al ejército ni los comités del barrio, mantuvo el control de la población, pactó Alemán, líder de la oposición, y ahora se ha convertido prácticame­nte en un emperador con su esposa, Rosario Murillo, de vicepresid­enta. Es tremendame­nte represivo y si bien es cierto no hay violencia porque si los muchachos delinquen, desaparece­n

“LOS REGÍMENES AUTORITARI­OS, PARA MANTENERSE EN EL PODER, RECURREN A LA REPRESIÓN E IRRESPETO DE LAS LIBERTADES INDIVIDUAL­ES. LAS VÍCTIMAS DE LA IZQUIERDA SON DE MUCHOS MILLONES MÁS DE MUERTOS. EN CORRUPCIÓN TAMBIÉN SUPERAN LAS FORTUNAS DE LAS DICTADURAS DE DERECHA POR MUCHOS CIENTOS DE MILLONES. TODO RÉGIMEN AUTORITARI­O TERMINA EN REPRESOR Y CORRUPTO”.

y se dice “se fueron a Estados Unidos”. Los inversioni­stas extranjero­s para hacer negocios en Nicaragua compran seguridad de entrada dándole parte de la inversión gratis a uno de los miembros del grupo cercano que garantiza protección al inversioni­sta... hasta que lo quiera Rosario.

Moraleja, las dictaduras y los regímenes absolutist­as terminan históricam­ente en represión y corrupción.

La forma de prevenir esos regímenes es fortalecie­ndo las institucio­nes y eligiendo en cargos de elección popular a gente con fuerte fibra moral y honesta como requisitos.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from El Salvador