CELAM DICE QUE LAS PANDILLAS DEBEN SOMETERSE A LA LEY DEL PAÍS
El Consejo Episcopal si bien advierte que se debe concertar, es para que se aplique la ley en los casos que lo ameritan y de esta forma también buscar la reinserción en la sociedad.
Negociar con las pandillas no signica concesiones, sino que como infractores de la ley acepten las consecuencias de esta para reintegrarse a la sociedad; así lo interpretó ayer el cardenal Rubén Salazar, presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano, durante la cumbre del CELAM que se realiza en el país. Si bien Salazar hizo un llamado al diálogo, al respeto de los derechos humanos, fue enfático al decir que una concertación política es diferente al diálogo con la delincuencia.
“En estos casos extremos como es la violencia de pandillas contra el Estado, contra el Gobierno, contra la población, es indudable que también se encuentren caminos de diálogo para que se puedan someter a la ley y puedan, por tanto, cesar esa situación angustiosa”, dijo Salazar.
El presidente del CELAM hizo tal reflexión al confirmar que no habrá un pronunciamiento específico para El Salvador como sí lo hubo para la situación que vive Venezuela, en el que afirman les “duelen las muertes, la violencia, la carencia de lo más fundamental, la división, la violación de los derechos humanos”, y hacían un llamado a la solución negociada en dicho país.
El cardenal hizo una similitud entre los países de Latinoamérica que viven violencia, aunque especificó que son diferentes tipos. En el caso salvadoreño, lo comparó con las pandillas colombianas que trafican con drogas y enfatizó que no es el mismo tipo de negociación que se hace por causas políticas. Y aclaró de manera muy enfática “que las pandillas u otros delincuentes se deben acoger a la ley, aceptar la ley, y por lo tanto aceptar los castigos que merecen por sus crímenes y sean capaces de reintegrarse a la sociedad”.
NEGOCIACIÓN
Salazar aseguró que para llegar a un compromiso real a través del diálogo se necesita la participación de todos, y que la concertación debe de estar orientada a una solución pacífica de manera participativa, conservando siempre la calma y la cordura y llamando permanentemente a la unidad.
Se trata, a criterio del sacerdote, de conservar “siempre la calma
“En estos casos extremos como es la violencia de pandillas contra el Estado, contra el Gobierno, contra la población, es indudable que también se encuentren caminos de diálogo”.
“Las pandillas u otros delincuentes se deben acoger a la ley, aceptar la ley, y por lo tanto aceptar los castigos”. RUBÉN SALAZAR, PRESIDENTE DEL CELAM
y la cordura y de hacer un llamado permanente a la unidad”.
Para el presidente del CELAM, el negociar con los que tienen intenciones políticas es totalmente diferente a un diálogo con la delincuencia, son procesos que tienen connotaciones distintas.
Pero el “llamamiento es siempre a respetar profundamente los derechos humanos, a respetar profundamente la dignidad humana, a nunca atentar contra ningún derecho humano”, aseguró.
El gobierno anterior, del expresidente Mauricio Funes, realizó una negociación con las pandillas para lograr la reducción de homicidios, pero a cambio de ello los pandilleros recibieron una serie de privilegios. El hecho fue un total fracaso.