Seabrióel telóndel cielopara Isabeldada
Isabel Dada, reconocida por sus numerosas presentaciones teatrales y por su actuación en la televisión salvadoreña, falleció ayer, en su residencia, rodeada del cariño y atenciones de sus hijos y familiares.
Esta actriz salvadoreña nació el 11 de septiembre de 1941 en San Salvador, en el hogar formado por Ventura Dada y Teresa Rinker de Dada, quienes además procrearon cuatro hijos más: Guillermo, Roberto, María Teresa y María Lourdes.
Ella hizo saber que aunque sus padres nunca la apoyaron en su pasión por el teatro, nunca le dijeron que no lo hiciera.
Cursó sus primeros estudios y el bachillerato en el Colegio La Asunción. A los 18 años estudió teatro en México, y en Estados Unidos se graduó como secretaria bilingüe.
Trabajó en el Banco Central de Reserva. Además, trabajó con su padre, un reconocido empresario y propietario de Dada Dada y Compañía.
Hoy lloran su partida sus hijos Fabiola Valiente Dada, Mario Guillermo Valiente Dada, Marco Antonio Valiente Dada, sus cuatro nietos y demás familia.
Ella siempre se consideró defensora de la familia.
CON LARGA Y TRAYECTORIA GALARDONADA
Doña Isabel venía de una familia involucrada en el arte y ella misma le dedicó casi 50 años de vida al teatro.
En 2003 fue galardonada por la Asamblea Legislativa con el título de Actriz Meritísima de El Salvador.
La recordada intérprete, quien hizo radio, cine y televisión, también ganó el Premio Nacional de Cultura en 2008. Este galardón fue otorgado por el Consejo Nacional para la Cultura y el Arte (CONCULTURA), institución que
“Yo me voy a ir de esta vida con la satisfacción de que di todo, el que tenga oído para oír que oiga mi filosofía de vida, pero yo no concibo a un pueblo sin arte, porque para mí es un pueblo triste y la tristeza genera frustración y eso desemboca en violencia”.
“Me preguntan mis familiares e hijos que si la vida no va terminando a cierta edad, y yo les digo que yo no siento que la vida vaya terminando. Termina cuando Dios quiere, pero el arte no termina”. ISABEL DADA
se transformó en la Secretaría de Cultura de la Presidencia.
Durante una entrevista concedida a LA PRENSA GRÁFICA, la abnegada madre y actriz dio a conocer que desde sus tres años de vida actuaba en su casa.
Asimismo, contó que a los 11 años ya actuaba en el Teatro Nacional.
Tuvo sus inicios como actriz profesional en la estatal Universidad de El Salvador durante los años sesenta, cuando el llamado Teatro Universitario era dirigido por el español Edmundo Barbero.
El velorio se realizará en Capillas Memoriales y descansará en paz en Jardines del Recuerdo, donde será sepultada esta tarde y donde familiares y amigos se reunirán para darle el último adiós. Del recuerdo.