EL SALVADOR HARÁ PETICIÓN FORMAL PARA EXTENDER TPS
El canciller Hugo Martínez sostiene que debido a “los tiempos” actuales se adelantará la solicitud. Para hacerlo, presentará pruebas de la contribución de la diáspora a la economía de EUA.
“Acordamos que era importante que aportáramos datos sobre las contribuciones que los salvadoreños hacen a la economía de EUA”.
“Hemos analizado varios estudios que nos dicen que más del 88 % de los salvadoreños acogidos a TPS tiene un empleo aquí en Estados Unidos”.
El Gobierno de El Salvador, a través de la cancillería, presentará una petición formal a la administración de Donald Trump, en Estados Unidos, para pedir una prórroga más del Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés). La solicitud se estaría haciendo en tiempo adelantado, ya que la extensión actual, que protege a más de 190,000 compatriotas, vence en marzo de 2018.
Pero el canciller Hugo Martínez dijo ayer, al iniciar una gira en Washington que culminará el sábado: “Es un momento propicio ya para presentar una solicitud formal de extensión de TPS. Lo hemos hecho de forma verbal, pero vamos a proceder ya por los tiempos en que nos encontramos a hacer una petición formal”.
Ese pedido, Martínez lo defendería ante el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) con pruebas en mano de los aportes de la comunidad salvadoreña a la economía de Estados Unidos. Es la cabeza del DHS la que recomienda, o no, al presidente de esa nación el extender el beneficio migratorio a un país. Martínez se había reunido para tratar el tema con el exsecretario John Kelly, pero debido a un movimiento súbito dentro del gobierno de Trump, el canciller salvadoreño ha tenido un primer acercamiento con la nueva secretaria de Seguridad Nacional, Elaine Duke. La petición se haría en un momento difícil, ya que a solo días de haber tomado las riendas del departamento que comanda los movimientos de peso en materia de Inmigración, Duke decidió terminar con parte de un programa que otorgaba permisos temporales de residencia a menores de El Salvador, Honduras y Guatemala.
Con ese lineamiento, mandado por Trump, Duke cortó un programa que beneficiaba en un 80 % a familias salvadoreñas.
Martínez aseguró que “acordó” en reuniones anteriores con oficiales del DHS que presentaría evidencia de los aportes que la comunidad salvadoreña hace a Estados Unidos.
De acuerdo con esa información, Martínez reveló que más del 88 % de los salvadoreños con TPS tiene un empleo fijo en Estados Unidos. Además de eso, la mayoría trabaja más de 40 horas, a veces en más de un empleo o haciendo más de un turno.
Los rubros en los que se desempeñan los compatriotas, según los datos de cancillería, son construcción, restaurantes, alimentación, agricultura, jardinería, y otros.
El canciller también tratará de hacer ver a funcio-
narios del Departamento de Estado, Seguridad Nacional y de la Casa Blanca que los connacionales con este estatus “dan un aporte anual de unos $500 millones a Medicare y a Seguridad Social. Estamos hablando de una población económicamente muy activa aquí en el área metropolitana de Estados Unidos, pero en toda la Unión Americana”, sostiene.
Trump ha centrado su campaña y administración en el “America First” (Estados Unidos Primero) y en diferentes casos, la condicionante para dar un beneficio a un extranjero ha sido que esa persona pueda aportar de forma sustancial a la economía del país que dirige o que represente algún tipo de ganancia para el país.
Honduras pidió su extensión de TPS en julio pasado, es decir, seis meses antes de que su periodo de gracia caduque.
El Ministerio de Relaciones Exteriores contrató hace meses a la firma de abogados Dentons Law para, de acuerdo con Martínez, buscar asesoría para obtener una extensión del TPS, dar guías legales para quienes se inscriben para pasar a otro tipo de estatus en Estados Unidos, y para encontrar una alternativa al programa.
Estados Unidos extendió el TPS para El Salvador el 9 de marzo de 2001, a raíz de dos terremotos. En la actualidad, el país es una de las 10 naciones que tienen este beneficio que permite trabajar y vivir de forma legal, pero estrictamente temporal, en Estados Unidos.
La presidencia de Trump ha representado un panorama incierto para esta población. Activistas se mueven para defender este estatus.
La incertidumbre ha aumentado desde que el DHS –en ese momento en manos de Kelly– extendió el TPS de los haitianos solo por seis meses más. Un hecho sin precedentes, ya que regularmente este estatus se extiende por 18 meses.
Kelly advirtió a más de 40,000 ciudadanos de Haití que usen estos seis meses para preparar su regreso a su país de origen.
El canciller Martínez estará en Washington hasta el sábado y el centro de su agenda bilateral es el TPS.