LA HORA DE LA VERDAD EN PENSIONES Y PACTO FISCAL
El FMLN y su gobierno tienen una oportunidad enorme para poder resolver de una vez por todas los problemas fiscales que enfrentan y una propuesta de los cuatro partidos de oposición representados en la Asamblea Legislativa para aprobar la reforma al sistema de pensiones que les resolvería los compromisos con los pensionados actuales del ISSS y del INPEP y con los ahorrantes del sistema de ahorro de pensiones (SAP).
En cuanto a la propuesta de reforma al sistema de pensiones, los cuatro partidos de oposición (PCN, PDC, GANA y ARENA) han planteado lo que ellos denominan una “propuesta integradora”, es decir que toma en cuenta elementos de las cinco propuestas anteriores y presentaron una reforma de 60 páginas. La ventaja de contar con la aprobación de los cuatro partidos políticos es que podría contar con 53 votos, si todos los diputados de esos partidos políticos votaran a favor. Digo eso porque Francis Zablah se salió de GANA la semana pasada y pudiera ser que hubiera algún diputado del PCN o de ARENA que no esté dispuesto a votar por esa propuesta. Pero en todo caso, entre los diputados que votaran a favor, de esos cuatro partidos políticos, pudieran reunir más de 43 votos y aprobar la reforma planteada.
El secretario general del FMLN, Medardo González, dijo la semana pasada que veía con buenos ojos el que se hayan juntado los cuatro partidos y que ellos iban a analizar la propuesta. El FMLN puede tomar cualquiera de los siguientes caminos: rechazar la propuesta en el pleno a la hora de votar, que la aprueben los demás partidos políticos y dejar en manos del presidente de la República si la sanciona (aprueba), la observa o la veta; el segundo camino es que el FMLN puede abstenerse a la hora de votar y que el presidente la sancione o la devuelva con observaciones a la Asamblea Legislativa; la tercera opción sería que el FMLN la apruebe en el pleno y que el presidente la sancione. La única opción que haría que la propuesta aprobada por los partidos de oposición, con al menos 43 votos, no se convierta en ley, es que el presidente de la República la vete. El que el FMLN vote en contra o se abstenga no impide que se convierta en ley, ni el que el presidente la devuelva a la Asamblea Legislativa con observaciones.
La propuesta de los cuatro partidos políticos es una buena solución para el país y a pesar de que el FMLN tiene un tema de egos de por medio, ya que ninguna de sus dos propuestas, ni la de los sindicatos afines del FMLN serían aprobadas, debe considerar que les resuelven en buena medida el problema fiscal generado por las pensiones, es constitucional y sería aprobado por los diputados de la oposición. De ahí que el FMLN pudiera abstenerse de votar por la reforma para expresar su inconformidad con ella, pero el presidente podría devolverla con observaciones y dejar en manos de los diputados superarlas, para que pueda convertirse en ley de la República.
La nueva propuesta incluye medidas de las diferentes propuestas presentadas anteriormente, aunque la base conceptual y práctica, a pesar de las diferencias, es la propuesta de la Iniciativa Ciudadana para las Pensiones (ICP). Podríamos describir la “propuesta de integradora” como una versión mejorada de la ICP y que incluye elementos positivos de las otras propuestas. En mi opinión es una versión que incluye una buena cantidad de mejoras en la presentación política de los diferentes temas y la hace más tragable para las personas que veían la de la ICP como extremadamente técnica y rígida. De ahí que el FMLN debería ser pragmático y negociar con los otros cuatro partidos políticos que aprueben la reforma la próxima semana para que dé tiempo de hacer toda la “carpintería” que se requiere para implementar la reforma y que todo esté listo para que el gobierno ya no tenga que pagar los $91 millones en octubre.
Una vez sacado del camino el tema de pensiones, el gobierno debería retomar la negociación con ARENA y los otros partidos políticos para el pacto fiscal. Mi sugerencia es que retomen el acuerdo al que habían llegado hace un par de meses, con la mediación del Banco Mundial (BM), y que firmen un acuerdo que sea aceptable para que el Fondo Monetario Internacional (FMI) lo pueda traducir a un acuerdo con el país. Esto desentramparía la utilización de fondos del BID y del BM y le permitiría a Hacienda hacer uso de fondos de apoyo presupuestario con lo que podría cubrir sus necesidades de fin de año.
Es importante que se avance rápidamente en el pacto fiscal y el acuerdo con el FMI ya que el gobierno tiene que presentar el presupuesto de 2018 a la Asamblea Legislativa el 30 de septiembre y este ya debe incluir lo acordado con los partidos políticos, lo ordenado por la Sala de lo Constitucional en su resolución sobre la inconstitucionalidad del presupuesto de 2017 y todos los elementos que permitirían firmar el acuerdo con el FMI. No hay que olvidar que hay que dejar resuelto de una vez lo de los vencimientos de $1,089.5 millones en eurobonos en septiembre y diciembre de 2019. Con eso, más la reforma de pensiones, el país puede estar tranquilo que habría un camino de sostenibilidad de las pensiones y de las finanzas públicas a largo plazo.