Empleados de dos torres de Hacienda siguen bajo riesgo
Los trabajadores se encuentran preocupados debido a que, a seis meses del incendio que cobró cuatro vidas, no hay ninguna modificación en la infraestructura del lugar.
Seis meses han transcurrido desde que el 7 de julio de 2017, cuando en horas de la tarde la torre tres del Ministerio de Hacienda se incendió, provocando la muerte de tres empleados y un joven que visitaba las instalaciones, así como heridas en más de 20 personas, muchas de esas lesiones de gravedad por inhalar humo y por las quemaduras en su cuerpo. Algunos de los empleados que recuerdan ese fatídico día hablaron con LA PRENSA GRÁFICA para expresar su descontento a seis meses de la tragedia que marcó la vida de muchos trabajadores.
Aseguran que desde ese día hasta hoy todo sigue igual, nada ha cambiado: las constantes denuncias sobre las condiciones inseguras en la torre uno y dos del Ministerio de Hacienda no han bastado para que las autoridades de esta cartera de Estado hayan tomado la decisión de inhabilitar el lugar, que desde hace tiempo atrás es considerado como una de las infraestructuras que ya no tendrían que estar funcionando por el peligro y el riesgo que representa.
Para el secretario general del Sindicato de Trabajadores del Ministerio de Hacienda (SITRAMHA), Roberto Gómez, no ha habido ningún interés de parte del Gobierno para trasladar a los empleados hacia otro edificio que sí cuente con las medidas de seguridad necesarias ante una emergencia como la registrada el pasado 7 de julio en la torre tres.
“A seis meses de cuando las tres torres han sido diagnosticadas como inhabitables, aún hay aproximadamente 300 empleados siguen laborando en la torre uno y otros 300 en la torre dos. Hasta ahora no han llegado a hacer una evaluación de los daños de la
“A seis meses de que las tres torres fueron diagnosticadas como inhabitables, 300 empleados siguen laborando en la torre uno y otros 300 en la torre dos”.
“Ni siquiera ha habido un examen técnico que diga que pueden habitarse después del siniestro. Además, no ha habido dentro de los recomendables hechos”.
ROBERTO GÓMEZ,
SECRETARIO GENERAL SITRAMHA
infraestructura y no se cuenta con las medidas de seguridad”, manifestó Gómez.
Agregó que el Ministerio de Trabajo es el encargado de verificar la situación de las instalaciones en la torre uno y dos del Ministerio de Hacienda, según el artículo número 5 de la Ley General de Riesgo en los Lugares de Trabajo. Por lo que entregaron un recomendable en que se detallan las medidas de seguridad a implementarse en cada edificio de las tres torres.
“Ni siquiera ha habido un examen técnico que diga que pueden habitarse después del siniestro. Además, no ha habido dentro de los recomendables hasta la vez otra notificación de parte del Ministerio de Trabajo, donde digan que le dan prórroga, pero no le dan ni prórroga porque los tiempos de cumplimiento ya se terminaron”, aseguró el secretario general de SITRAMHA, quien afirmó que ningún recomendable se ha cumplido y que el plazo ya se venció, por lo que se está violentando e incumpliendo la ley.
Una de las recomendaciones que el Ministerio de Trabajo hizo en agosto pasado a las autoridades de Hacienda, según un documento en poder de este periódico, indica que se tienen que instalar extintores en cada nivel de los edificios de las dos torres que siguen funcionando, así también escaleras de emergencias externas en todo el edificio de la torre dos y colocar cinta antideslizante a las gradas que conducen a los ocho niveles de las torres.
El documento establece 16 recomendaciones para desarrollar en la torre uno y 24 recomendaciones para la torre dos, entre las que, además de la colocación de extintores, se sugiere colocar señalamientos de “peligro por alto voltaje” o “solo personal autorizado”, instalar un botiquín de primeros auxilios, colocación de señalización de seguridad en todos los niveles de las instalaciones de cada uno de los edificios de las dos torres, entre otras indicaciones.
Según los empleados del Ministerio de Hacienda, son indicaciones necesarias y urgentes que se tuvieron que realizar desde antes del siniestro, pero que ni la tragedia donde hubo víctimas mortales ha logrado que las autoridades recapaciten y actúen de inmediato, evacuando ambos edificios para que se evite otro incidente de tal magnitud.
TRAUMAS Y TERAPIAS
Desde el incendio, muchas personas tuvieron que recibir ayuda psicológica por el trauma que sufrieron, según anotan los trabajadores. Hasta ahora, son un aproximado de 60 personas, todas empleadas del Ministerio de Hacienda, las que se encuentran en terapias psicológicas.
“Yo, cada día que vengo a trabajar acá, a la torre uno, me siento hasta temblorosa porque no sé si volverá a pasar una tragedia igual o peor, donde esta vez seamos nosotros los que salgamos afectados, pero nuestro temor es en vano, ya que ante las narices del Gobierno no somos nada y nos han dejado inseguros ante algún desastre”, señaló una de las empleadas del Ministerio de Hacienda.
Los miembros del sindicato de trabajadores aseguraron que han buscado ayuda ante la Defensoría para los Derechos Humanos y ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT), también han interpuesto una denuncia en contra de las autoridades de Hacienda en la Fiscalía General de la República.
“Esperamos que la Fiscalía termine su tiempo para poder actuar, que son los seis meses cumplidos y, si no remite al juzgado el caso, tendríamos que hacer uso ya de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”, dijo Roberto Gómez, al mismo tiempo que aseguró que el plazo se vence este domingo 7 de enero, por lo que no se tuvo respuesta positiva de parte de la Fiscalía en el plazo establecido.
LA PRENSA GRÁFICA quiso contactar tanto a las autoridades del Ministerio de Hacienda como a las del Ministerio de Trabajo; sin embargo, el personal de comunicaciones de ambas instituciones dijo que gestionaría las entrevistas con los encargados para dar una postura respecto a esta situación. Este periódico sigue esperando una respuesta.
Por ahora, más de 600 personas distribuidas en la torre uno y dos del Ministerio de Hacienda se encuentran en zozobra por lo que pueda suceder en este 2018, ya que tienen la esperanza de ser trasladadas a otros edificios que cuenten con las medidas de seguridad y evaluaciones adecuadas para el uso de oficinas públicas. Ellos indican que las tres torres desde un inicio fueron construidas como edificios habitacionales y no para oficinas.
“Al menos hasta hoy, ya se ha iniciado con el traslado de los empleados de la torre tres que quedó inhabilitada después del incendio. Al menos 313 trabajadores que habían sido colocados en diferentes instancias de Hacienda ahora estarán en un edificio de cinco pisos en buenas condiciones, cerca del estadio ‘Mágico’ González”, anotó un miembro de SITRAMHA.
Luego de algunos meses hospitalizados, todos los empleados que resultaron con quemaduras graves y que fueron atendidos en el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), según los compañeros y familiares, fueron dados de alta en buenas condiciones.
Sin embargo, Raúl Anaya de la Dirección General de Impuestos Internos, quien resultó con quemaduras internas y externas graves, luego del incendio en la torre tres del Ministerio de Hacienda, aunque se encuentra en su casa, ha quedado con secuelas irreversibles en su cuerpo.
“El último compañero al que le dieron de alta está bien delicado, está incapacitado, está en su casa con tratamiento especial. El compañero ha sufrido quemaduras internas, los brazos los tiene quemados, está muy mal”, indicó Roberto Gómez, del sindicato del Ministerio de Hacienda.
Por su parte, los trabajadores de Hacienda señalaron que a los familiares de los tres compañeros fallecidos tras el incendio y a la madre del joven Daniel Aquino, un joven visitaba la torre y se lanzó desde la azotea, solo se les pagaron los gastos fúnebres, no hubo indemnización. Al parecer, según ellos, se les abrió una plaza en el Ministerio de Hacienda por lo que hasta la fecha se encuentran laborando en alguna área de esta cartera de Estado.
Este periódico intentó contactar a la madre de Daniel, pero ella no contestó el teléfono celular.
“Yo, cada día que vengo a trabajar acá, a la torre uno, me siento hasta temblorosa porque no sé si volverá a pasar una tragedia igual o peor, donde esta vez seamos afectados”.
EMPLEADA,
TORRE UNO MINISTERIO DE HACIENDA