Sectores y transformación productiva avanzan
Iniciamos 2018 con optimismo. La tendencia de recuperación sostenida de la economía ha demostrado que estamos en un ciclo de crecimiento continuo de los más importantes indicadores que miden nuestra economía y bienestar de nuestra sociedad. La economía ha crecido por 10 trimestres consecutivos por arriba de su promedio histórico potencial, que es de 2.0 %, ha reducido la volatilidad del crecimiento y manda señales de estabilidad y predictibilidad a los agentes económicos, estimulando las inversiones de largo plazo y reduciendo el riesgo asociado, que darán paso a mayor empleo y crecimiento. La estabilidad inflacionaria es otro aspecto destacable. La inflación acumulada al cierre del año se estima en 1.6 %, lo que nos ubica como la tercera economía latinoamericana con el indicie de inflación más bajo. En materia de clima de negocios, nuestro país reportó un significativo avance. De acuerdo con el Doing Business, del Banco Mundial, El Salvador se ubicó en la posición 73 de un total de 190 países evaluados, lo que representó una mejora de 22 posiciones en relación con 2016. Desde que inició la administración del presidente Salvador Sánchez Cerén, hemos mejorado 45 posiciones en este indicador y somos ya la segunda economía de Centroamérica con mejor clima de negocios. Los sectores productivos apoyados desde la Política de Transformación Productiva mostraron una dinámica favorable en 2017. Sus ventas totales crecieron en 10.4 %; mientras que sus exportaciones, en 8.6 %. Entre los sectores que destacan por su desempeño está la industria de la construcción, que pasó en los últimos años de un crecimiento negativo de -10.4 % a uno positivo del 3 %. De igual manera, el crecimiento del turismo fue cerca del 10 % y la industria farmacéutica realizó inversiones por encima de los $70 millones para la obtención de las acreditaciones internacionales que le permiten ser hoy en día la más competitiva de la región. En materia de apertura comercial destaca el cierre de las negociaciones del TLC entre Centroamérica y Corea del Sur. Por primera vez obtuvimos acceso inmediato y sin cuota de nuestras exportaciones de azúcar y acordamos una regla de origen para las exportaciones de prendas de vestir que fortalecen la integración de nuestra cadena textil y confección. La firma de dicho acuerdo está prevista para febrero próximo. Además, están vigentes las mejoras del TLC con Taiwán y Colombia y acuerdos con Trinidad y Tobago, Ecuador y Bolivia. Nuestras 15 consejerías económicas y comerciales en el mundo brindaron 324 contactos comerciales, 249 oportunidades de comercio y 107 oportunidades de inversión proyectadas. Dimos un paso histórico al incorporarnos al proceso de integración aduanera con Guatemala y Honduras. Con la ratificación legislativa del Convenio de Compatibilización de Tributos Internos en el mes de noviembre y con los avances logrados hasta la fecha en las rondas de negociación, aspiramos a cerrar 2018 con una integración aduanera sólida en el Triángulo Norte, que estimulará los flujos de comercio y dinamizará nuestro sector externo. Este panorama positivo ha desencadenado el crecimiento de la inversión privada, tanto nacional como extranjera. En 2017 la inversión extranjera directa fue la mayor de los últimos 10 años, alcanzando al cierre del tercer trimestre $436 millones de inversión neta. La diversificación de nuestra matriz energética nos ubica como líderes regionales en generación de energía limpia y renovable, con inversiones sobre los $1,300 millones, precio bajo para los sectores productivos y su competitividad, así como para las familias salvadoreñas. Persisten importantes desafíos para seguir consolidando este proceso de transformación productiva con innovación y desarrollo, el cual debe reflejarse en más empleados, mayor poder adquisitivo y bienestar de las familias. Son solo algunos de los temas que tenemos en la agenda 2018 y que esperamos seguir impulsando de la mano con el sector productivo, como lo hemos hecho hasta ahora. Unámonos para crecer.