Cámara anula condena por muerte de cadete
La cámara de Santa Tecla ordenó que otro juez lleve a cabo un nuevo juicio contra dos oficiales y varios cadetes.
La Cámara de la Cuarta Sección del Centro, ubicada en Santa Tecla, anuló la sentencia condenatoria impuesta a dos oficiales y tres cadetes, por el homicidio agravado en contra del cadete Juan Carlos Zelaya, quien fue golpeado y luego ahogado en la piscina de la Escuela Militar Capitán Gerardo Barrios (EM), durante un entrenamiento en octubre de 2014.
La cámara ordenó que debe efectuarse un nuevo juicio contra los imputados Rafael Cañas Abarca, Jayro Orlando Baires, Enmanuel Navas Contreras, Jaime Isaac Lemus y Geovany Ernesto Rosales.
En abril de 2017, un juez del Tribunal de Sentencia de Santa Tecla condenó a Cañas Abarca y a Baires a 25 años de prisión por el asesinato del cadete Zelaya. También condenó a los cadetes Navas Contreras, Lemus y Rosales a 23 años de cárcel. Únicamente el cadete German Nieto Escobar fue absuelto de cargos.
La cámara designó a un nuevo juez para que realice un nuevo juicio: Cruz Antonio Pérez Granados, otro de los integrantes del Tribunal de Sentencia de esa jurisdicción.
“La cámara dijo que hubo negligencia por parte de fiscalía porque no ofreció como prueba los testimonios del conductor de la ambulancia ni de la enfermera. Para la cámara esa información es importante. Los cadetes regresan a primera instancia entonces ya se les venció el tiempo de la detención provisional. Lo legal fuera que decreten libertad”, dijo una fuente vinculada al caso.
La cámara, en la resolución, TONACATEPEQUE, SAN SALVADOR insta a la Fiscalía que ubique a estos testigos para el nuevo juicio.
Según la acusación fiscal, el 3 de octubre de 2014, cuando Zelaya cursaba el primer año en la Escuela Militar, fue tomado por sus compañeros de cuarto año para aplicarle “el minuto loco”, una práctica que consistía en tomarlo de los pies por un lapso de 60 segundos dentro del agua. En ese momento, según la versión de testigos, los oficiales Abarca y Baires, encargados del adiestramiento en la piscina, no garantizaron que las acciones de ese día se realizaran de acuerdo con las normas establecidas. Tras ese “minuto loco” y después de varios golpes, Zelaya falleció en la piscina.