CRUZADA ANTIINMIGRANTE DESDE EUA REBALSA EL SISTEMA DE REFUGIO EN CANADÁ
Asustados por la llamada “máquina de deportaciones” de Trump, los inmigrantes acuden al vecino del norte. Pero no es tan fácil, ni tampoco tienen los suficientes recursos para recibirlos.
Cuando Donald Trump no era ni siquiera candidato por el Partido Republicano, en junio de 2015, ya jugaba la carta del discurso antiinmigrante para ganarse la simpatía del público. Ahora que ya ha tomado el control en la Casa Blanca, sus acciones y nuevas disposiciones han empujado a muchos inmigrantes hacia la frontera con Canadá.
El año pasado, 20,000 personas cruzaron la frontera canadiense como indocumentados para pedir refugio o asilo, de acuerdo con un reportaje que publicó Reuters con la investigación de la periodista Anne Meheler Paperny.
El sistema canadiense de refugio, colapsado, parece salirse de sus mismos límites legales.
Los datos que publicó Reuters indican que a los 20,000 que llegaron desde Estados Unidos a Canadá de manera ilegal hay que sumar 1,500 que lo hicieron en enero, también para pedir refugio, soportando las bajísimas temperaturas y la incertidumbre.
“La mano dura del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra la inmigración por vía ilegal y su movida para despojar a los haitianos, salvadoreños y otros de su estatus legal temporal han tenido un efecto notable en el sistema de refugio de Canadá”, consigna Reuters. Quienes ya están en la lista de espera tendrán que continuar a la expectativa durante 20 meses más, indicaron las autoridades canadienses. Sin embargo, la ley estipula que deben contestar en 60 días. Y eso que han dado prioridad a los que ya están atrasados con las fechas. José Castillo, salvadoreño entrevistado por Univisión, no lo logró. Su solicitud de refugio fue rechazada por un tribunal canadiense y la apelación posterior también. Ahora le han solicitado que llegue a firmar su deportación. Ha tenido que separarse de su esposa, sus hijos y vivir en un sótano, de incógnito. “Con todo lo que ha estado pasando, como que llegué a arrepentirme de haber venido acá”, confesó el compatriota a Univisión. Él también cruzó de manera ilegal desde Estados Unidos a Canadá, te-
“Continuaremos enfocados en mantener el balance: un sistema riguroso (de inmigración) y aceptar a las personas que necesitan ayuda”. JUSTIN TRUDEAU, PRIMER MINISTRO DE CANADÁ
“De lo que yo venía huyendo de Estados Unidos, me lo he venido a encontrar acá (en Canadá)”.
JOSÉ CASTILLO,
SALVADOREÑOS QUE FUE DE ESTADOS UNIDOS A CANADÁ, ENTREVISTADO POR UNIVISIÓN
meroso de las deportaciones que llegarían con el nuevo presidente del Partido Republicano.
“De 17 organizaciones con las que habló Reuters, 11 indicaron que tras las entrevistas con los que cruzan la frontera confirmaron que muchos están huyendo debido a las políticas de Trump sobre la inmigración”, destaca el reportaje de la agencia.
En Toronto, tres de cada 10 personas que ocupan los albergues urbanos son personas esperando refugio (datos a febrero). Eso es un incremento del 18.5 % en comparación con el año anterior, indicó Reuters.
Junto a Toronto, Montreal, Winnipeg y Vancouver han solicitado ayuda al gobierno federal –dirigido por el primer ministro, Justin Trudeau– para hacer frente a lo que se viene. Mientras obtienen respuesta, la gestión Trudeau ha decidido invertir cerca de $133 millones en seguridad fronteriza.
Desde enero pasado, Canadá lanzó una campaña para prevenir la llegada masiva de salvadoreños desde Estados Unidos, porque sabían que la cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS) era inminente. Querían advertirles que lograr refugio en ese país es difícil y que no valía la pena arriesgarse. En efecto, la gestión Trump canceló el TPS para los salvadoreños ese mismo mes.