La Prensa Grafica

La casita de botellas

El cicloturis­mo nos permite darnos cuenta de lo que hay en el camino, de la necesidad, de las sonrisas y de las personas maravillos­as.

- Aurelio Golscher revistas@laprensagr­afica.com

Hemos dejado la hermosa ciudad de Conchagua y nos dirigimos hacia Usulután. La novena etapa del tour al Lejano Este nos dejaría una honda reflexión en este viaje. Luego de recorrer los 60 kilómetros desde Conchagua hasta El Delirio, cerca del cantón El Borbollón, en San Miguel, nos encontramo­s a María Bersabé Ponce, de 86 años, cargando 40 libras de leña en su espalda. Subimos la carga en la bicicleta y al preguntarl­e para dónde iba, dijo que “a la casita de botellas”. No entendí qué me quería decir. La acompañé. Mientras caminábamo­s continuaba recogiendo leña y le pregunté para qué la necesitaba “es para hacer quesadilla­s y salpores”.

Luego de caminar unos tres kilómetros, fue que entendí y no lo podía creer: realmente era una casita hecha con botellas de plástico y pintada de muchos colores.

“A mí se me cayó la casa cuando los terremotos de 2001; lo perdí todo”, comenta. Al preguntarl­e por qué se le ocurrió hacer la casa de botella, nos dice: “La casita la vi en un sueño. Era la noche de un sábado. La gente pensaba que estaba loca; en mi sueño solo la vi bien real. El día siguiente que tuve el sueño me levanté temprano, me tomé una taza de café y le dije a mi hija que iba a salir a la calle. Ella me preguntó que dónde iba a ir y yo le dije que tenía que irme a buscar botellas. Con esas vamos a hacer una casa bien bonita, y ella me dijo ‘usted está loca, mamá’”. Me tardé unos cuatro meses en recoger todas las botellas y unos tres meses en hacer la casita”, comenta. Aunque ella desconoce cuántas botellas utilizó, calculo que son entre 3,500 a 4,000 botellas.

Afuera de la casa tiene un horno artesanal para el cual necesitaba la leña; en él cocina las quesadilla­s dobladas y los salpores de maicillo que vende. Así se gana el sustento.

EJEMPLO DE RECICLAJE * AUNQUE ORIGINALME­NTE SU IDEA NO ERA RECICLAR SINO TENER UNA CASA DIGNA, MARÍA BERSABÉ IDEÓ LA FORMA DE UTILIZAR MATERIALES COMO BOTELLAS PLÁSTICAS Y VARAS DE CAÑA BRAVA PARA HACER SU SUEÑO REALIDAD: SU CASA.

 ??  ?? Sábado 31 de marzo de 2018 Un sueño. La casita encantada, como también le conocen, está ubicada en el cantón El Borbollón, jurisdicci­ón de El Tránsito, en San Miguel.
Sábado 31 de marzo de 2018 Un sueño. La casita encantada, como también le conocen, está ubicada en el cantón El Borbollón, jurisdicci­ón de El Tránsito, en San Miguel.
 ??  ?? Su hogar. Al haber perdido su casa durante el terremoto del 2001 tuvo un sueño de hacer una casita con botellas en donde los colores serían el rojo, verde y blanco. “Yo digo que el Señor me lo puso en mi cabeza”, asegura.
Su hogar. Al haber perdido su casa durante el terremoto del 2001 tuvo un sueño de hacer una casita con botellas en donde los colores serían el rojo, verde y blanco. “Yo digo que el Señor me lo puso en mi cabeza”, asegura.
 ??  ?? Estrellas de mar. En su sueño vio que en el piso había estrellas de mar. Ahora existen hechas de corcholata­s y latas.
Estrellas de mar. En su sueño vio que en el piso había estrellas de mar. Ahora existen hechas de corcholata­s y latas.

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