HACIENDA BUSCARÁ $2,600 MILLONES EN BOLSA DE NUEVA YORK
La cartera estatal está preparando una propuesta para conseguir financiamiento para la deuda que vence en el próximo quinquenio. La Asamblea Legislativa debe aprobar el plan, que dejaría la mesa limpia para el gobierno que asuma en 2019.
El Salvador debe buscar la forma de refinanciar $2,600 millones en deuda que se vencen entre 2019 y 2023. El Ministerio de Hacienda, actualmente bajo la dirección de Nelson Fuentes, alista un plan para buscar estos fondos en la plaza de Nueva York. Esta es una apuesta ambiciosa, y requerirá del aval de la recién instalada Asamblea Legislativa, pero el nuevo titular de Hacienda confía en que todos los partidos darán sus votos, principalmente porque esta operación dejará la mesa limpia para quienes asuman el Gobierno a partir de 2019, tras las elecciones presidenciales de febrero próximo.
“En términos de mercados internacionales El Salvador tiene la posibilidad de entrar a otra liga si aprovechamos las ventanas de oportunidad que se abren este año. Si existen espacios en la Asamblea Legislativa que podamos aprovechar en este periodo de despolarización política, pudiésemos encontrar en El Salvador una opción para el inversionista internacional”, aseguró Fuentes. El plazo para lograrlo es cercano, pues Hacienda debería tener todo listo para octubre de este año.
El plan, por demás, ambicioso. Mientras en años anteriores se han entrampado las aprobaciones de deuda menores a $900 millones, ahora Hacienda busca que los diputados den el visto bueno, de una vez, a $2,600 millones. Esto implica un cambio en la forma en la que se planifica el pago de la deuda.
“Estamos pensando en una estrategia de financiamiento de mediano plazo, anteriormente nosotros íbamos a la Asamblea año con año para solicitar aprobación para el pago de vencimiento de los bonos. Lo que estamos pensando ahora es aprovechar esta ventana política y solicitar la aprobación legislativa de $2,600 millones”, explicó Fuentes.
Si los partidos efectivamente logran un acuerdo para aprobar la reestructuración de la deuda del país, los beneficios van más allá de asegurar los fondos para pagarles a los tenedores de los bonos que venden entre 2019 y 2023: los mercados internacionales lo interpretarían como un gran acuerdo político, algo que durante años ha hecho falta en la Asamblea Legislativa, y que ha entrampado la aprobación de préstamos y la toma de decisiones en materia fiscal.
Entidades como Fitch Ratings, Standard & Poor's y Moody's, que se dedican a evaluar la calidad crediticia de los países y a calificarlos según su capacidad de pago –algo que determina, entre otras cosas, qué tan alta es la tasa de interés que debe pagar un país para conseguir financiamiento internacional–, han insistido en que en El Salvador hay un “gridlock” o “enllavamiento” político, lo que ha hecho que se mantenga baja la calificación del país.
El año pasado, y después de un retraso en el pago que el Gobierno debía hacer a los fondos de pensiones, El Salvador cayó en “default” o impago selectivo. Las calificadoras lo enviaron al sótano, junto con Venezuela, y no volvieron a subir la nota sino hasta finales de 2017, cuando los partidos lograron un acuerdo para aprobar la reforma del sistema de pensiones.
Mauricio Choussy, expresidente del Banco Cen-
tral de Reserva (BCR) y ex director regional de Fitch, dice que la reforma de pensiones fue una señal de que se pueden tomar acuerdos de país, como el que se requiere en la parte fiscal. “También se logró un acuerdo para el tema del presupuesto 2018, pero queda pendiente el pago de la deuda que vence entre 2019 y 2024. Debería aprovecharse y buscar un acuerdo más amplio para este financiamiento, sería una señal muy positiva”.
¿BONOS EN NUEVA YORK?
Pero, ¿qué es lo que quiere hacer Hacienda? En principio, la idea es inscribir un instrumento de El Salvador en la Bolsa de Nueva York. El ministro dijo que aún no puede revelar el tipo de instrumento, para evitar especulaciones.
Lo que sí aseguró es que esta vía de búsqueda de financiamiento tendrá más potencial y menores costos financieros que la que tradicionalmente se ha usado, y que ha sido emitir eurobonos de El Salvador, inscritos en la Bolsa de Luxemburgo.
“Es otro mercado al cual El Salvador no ha tenido acceso nunca. Utilizaríamos un instrumento financiero que nos da la capacidad de negociar, de salir al mercado sin necesidad de hacer un trabajo de tres meses, sino en el momento en que la ventana de oportunidad esté bien, sin esperar ningún proceso”, precisó Fuentes.
Hacienda presentará a la Presidencia de la República este mismo mes dos anteproyectos de ley, uno para el refinanciamiento del saldo de las Letras del Tesoro (LETES) y otro para el “rollover” o refinamiento de la deuda de mediano plazo. El primero de los vencimientos de eurobonos es uno por $900 millones, en noviembre de 2019.
“En mayo le presento al presidente de la república los anteproyectos de ley. Quiero tener mayo y junio para explicarles a los diputados y diputadas”.
NELSON FUENTES,
MINISTRO DE HACIENDA