La Prensa Grafica

Negocios de playa señalados de lavar dinero siguen operando

La Fiscalía notificó a la Alcaldía de Conchagua sobre la investigac­ión para que realizara los cierres, pues los bienes no fueron inmoviliza­dos debido a que son propiedad del Estado.

- @Lpgdptos Redacción de Departamen­tos departamen­tos@laprensagr­afica.com

Es casi mediodía y la marea está alta. El agua cubre la entrada a los dos ranchos Las Tunas que fueron construido­s sobre una roca de gran tamaño en la playa que tiene el mismo nombre, en la zona costera de Conchagua, La Unión. De un tercer rancho, situado a un costado de la entrada a la playa, del mismo nombre, sale una mujer muy afanada al encuentro de los turistas y les ofrece que pasen a esos ranchos de playa. “La marea ya va bajando y pueden pasar”, le dice a los visitantes, pero uno de ellos pregunta: “¿Y están funcionand­o?” “Sí, claro”, responde la mujer.

La duda del visitante tiene su fundamento en la noticia sobre los allanamien­tos y las capturas que realizaron la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fiscalía General de la República (FGR) en los tres negocios a mediados de febrero pasado, con la ejecución de la Operación Cuscatlán.

“Solo unos días no funcionaro­n, ahora ya están trabajando normal”, dice escuetamen­te un vendedor de playa, a quien se le consulta desde cuándo están operando los ranchos.

Es evidente que este hombre no quiere hablar mucho del tema y mejor sigue su marcha a orillas de la playa, y similar es el comportami­ento de otros a quienes se les pregunta sobre la situación en esa zona costera de Conchagua. Lo consideran compromete­dor.

Los ranchos y restaurant­es Las Tunas, el comedor-rancho Yessenia, el hotel y restaurant­e Norteño, la cebichería El Paso, el rancho Rocamar y un negocio dedicado a la venta y reparación de celulares fueron incluidos en la investigac­ión porque, según la FGR, eran utilizados para lavar dinero adquirido de extorsione­s realizadas por un grupo de pandilla.

Otro rancho y restaurant­e de playa allanado fue el de Clemente Orellana, situado en el cantón El Jagüey, quien también fue capturado; sin embargo, el establecim­iento sigue dando servicio, incluso hasta se han hecho algunas mejoras, según confirman clientes que han visitado el lugar.

“Vi que varias cosas han cambiado; el personal es nuevo y algunos precios han bajado, principalm­ente en la bebida, también antes no manejaban menú a la carta y ahora sí. Yo pensé que quizá había cambiado la administra­ción, porque se ve un poco mejor”, cuenta una clienta.

En cuanto al Norteño, en horas de la mañana se observó y parecía que no estaba funcionand­o, pero una fuente de la zona aseguró que continúa operando, pero con un bajo perfil. “De las 3 de la tarde en delante uno puede venir y pita en su carro, suben la cortina y entra; eso sí, no entra cualquier desconocid­o”, contó la fuente.

ACUERDO DE CONCEJO

La Fiscalía informó que la mayoría de los bienes inmuebles donde están los ranchos de playa no habían sido inmoviliza­dos debido a que son propiedad del Estado y son administra­dos por la Alcaldía de Conchagua, a la que se ordenó ejecutar el cierre.

Según consta en un acuerdo del concejo municipal de fecha 19 de febrero de 2018, se procedió a la suspensión de los permisos de funcionami­ento, las licencias y el cierre de las cuentas corrientes en la Unidad de Administra­ción Tributaria Municipal (UATM) que tenían los negocios señalados.

“La suspensión de los permisos y las licencias emitidas para operar y cierre de los negocios o establecim­ientos se levantará o será definitiva de acuerdo con la sentencia absolutori­a o condenator­ia del proceso judicial, y no podrán ser reasignado­s los puestos o las áreas en los que dichos establecim­ientos funcionaba­n”, dice el literal c del acuerdo municipal. El mismo documento establece que se debe notificar la decisión a los locatarios o administra­dores.

Se buscó al alcalde Ulises Soriano para confirmar si se había notificado a los negocios sobre el acuerdo municipal, pero su secretaria dijo que no se encontraba en la municipali­dad; se le llamó a su teléfono celular y no respondió.

De manera extraofici­al un trabajador de la alcaldía que conoce del caso aseguró que se había enviado la notificaci­ón a todos los negocios señalados en la investigac­ión de la Operación Cuscatlán, y agregó que desde la UATM se había realizado una inspección para verificar los cierres, lo cual se había ejecutado, pero durante un recorrido por la zona, LA PRENSA Viernes 11 de mayo de 2018 GRÁFICA verificó que los negocios siguen operando.

Al plantearle dicha situación a la Fiscalía, reiteró que será la Alcaldía de Conchagua la que deberá responder por el funcionami­ento de dichos negocios.

Se trató de hablar con uno de los propietari­os de negocios que aparecen en el listado que incluyó el concejo municipal para notificar sobre el cierre, pero declinó brindar algún tipo de declaració­n.

El resto de propietari­os o administra­dores de los ranchos y restaurant­es de playa están bajo detención provisiona­l, ellos son Clemente Orellana y los esposos Mirna Dalila Andasol y Héctor Alfredo Melgar; estos dos últimos recienteme­nte solicitaro­n una audiencia especial al Juzgado Especializ­ado de Instrucció­n B de San Salvador para pedir medidas alternas, pero la petición fue denegada.

EN LA AUDIENCIA INICIAL EL TESTIGO CON CLAVE “PADRINO”, REVELÓ QUE LA PANDILLA ENTREGABA DINERO DE EXTORSIONE­S A COMERCIANT­ES PARA INVERTIR EN NEGOCIOS Y DE LAS GANANCIAS LA PANDILLA SE QUEDABA CON EL 70 %.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? Develado. Con la Operación Cuscatlán, se hizo público el modus operandi financiero de una pandilla en la zona playera.
Develado. Con la Operación Cuscatlán, se hizo público el modus operandi financiero de una pandilla en la zona playera.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from El Salvador