Trump usa a la MS sin argumentos sobre leyes migratorias del país
Organizaciones civiles y miembros de comunidades de Long Island lo criticaron.
Las leyes migratorias de Estados Unidos no tienen ningún vacío que sea aprovechado por pandilleros para ingresar al país; así responden las organizaciones civiles y miembros de la comunidad al discurso que el presidente Donald Trump dirigió en el foro Llamada Nacional y Cambios de Política Legislativa, en la ciudad que se ha convertido en la zona cero de la guerra contra la MS en Estados Unidos, Long Island.
“No es cierto que existen esos huecos o vacíos legales de los que habla el presidente. Los jóvenes que ingresan como menores no acompañados pasan por procesos rigurosos, están registrados, cumplen chequeos, dejan sus huellas digitales registradas. Decir que existen vacíos es crear una retórica de violación a los derechos de estos jóvenes”, dijo a LA PRENSA GRÁFICA Irma Solís, directora de New York Liberties Union, organización que asiste a jóvenes inmigrantes en conflicto con la ley. Para las organizaciones civiles de derechos humanos, el discurso y la agenda que ha mantenido el presidente Trump es solo una excusa sin fundamentos que, además de contribuir al odio, ha generado miedo, discriminación y violencia, y ha hecho que los inmigrantes regresen a las sombras en sus comunidades.
“No entendemos cuál es su fascinación por criminalizar a los inmigrantes. Cuando habla de los vacíos legales, habla sin hechos y sin argumentos reales. Esto está causando que haya más odio en el país, que haya un decrecimiento en la participación de los inmigrantes en las actividades de las comunidades”, dijo Mayra Aldas Deckert, de la organización New York Immigration Coalition (NYIC), que organizó una de las protestas por la visita de Trump a la ciudad.
A unos kilómetros de donde el presidente enfatizaba su discurso la necesidad de que los demócratas adopten una postura favorable al cambio de las leyes migratorias para evitar que los miembros de la MS continúen ingresando o permaneciendo en el territorio estadounidense, en una escuela de Hampshire, se resolvía un conflicto entre jóvenes por afiliaciones pandilleras. José Lino, activista y líder comunitario de Long Island que trabaja con jóvenes y con expandilleros en las escuelas de la zona para resolver estos conflictos, considera que este discurso ha contribuido al crecimiento de las pandillas.