Temer pide que el diálogo que puso fin a paro camionero guíe a los brasileños
Aún existen problemas en el abastecimiento de gasolina, se ha dado prioridad a la entrega del diésel.
El presidente brasileño, Michel Temer, pidió ayer que el diálogo que permitió poner fin a la huelga de camioneros que paralizó virtualmente al país durante los últimos 11 días guíe a los responsables para dirigir a la nación.
“Gracias a Dios estamos terminando la huelga de camioneros, por medio de una actitud que llegó a ser criticada, la del diálogo”, declaró el mandatario en una ceremonia de una iglesia evangélica.
“No uso la fuerza ni la autoridad. Uso el diálogo, la palabra y así lo hace todo el Gobierno, conectado con los estados y también con los municipios”, subrayó.
“Que esto sirva de ejemplo para todos”, afirmó Temer, quien subrayó que los dirigentes de una nación deben guiarse por una “palabra de paz, de armonía, de respeto mutuo, y por el culto a la familia y la unidad”. Aunque el Gobierno admitió que aún restan unos pequeños focos de protesta, este miércoles ya casi todos los camioneros abandonaron los bloqueos que mantenían en las carreteras y se reincorporaron a su trabajo.
Las autoridades informaron que ayer solo quedaban unos 30 puntos de concentración de camioneros, aunque el almirante Ademir Sobrinho, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, dijo que en la mayoría de los casos eran vehículos estacionados que sus conductores aún no se habían puesto en marcha. La única preocupación del Gobierno es retomar a plenitud la distribución de productos básicos.