Paramilitares y policías matan a 10 en Masaya
Las protestas contra Daniel Ortega y contra su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, comenzaron por las reformas fallidas de la seguridad social.
Al menos 10 personas murieron, 62 resultaron heridas y 10 desaparecieron en los enfrentamientos registrados desde el sábado hasta ayer en la madrugada en la ciudad nicaragüense de Masaya entre civiles y la Policía, apoyada por grupos afines al Gobierno, informó ayer la ONG Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH). El secretario ejecutivo de la ANPDH, Álvaro Leiva Sánchez, dijo en rueda de prensa que desde el sábado pasado hasta este lunes en horas de la madrugada se registraron además 120 detenidos producto de los fuertes enfrentamientos.
Entre los fallecidos se encuentra Javier Júnior Gaitán Hernández, de 15 años; el profesor Carlos Érick López (23); y el policía José Abraham Martínez (22). También Donald López (27), quien, según el sacerdote Edwin Román, párroco de la iglesia San Miguel en Masaya, “fue ejecutado” por una oficial que le disparó al pecho cuando estaba detenido e indefenso.
De los 62 heridos; 61 son civiles, y uno, oficial de la Policía Nacional.
De los 120 detenidos, 60 civiles fueron liberados por intervención de padres de la Iglesia católica y ANPDH, y la entrega a los activistas de cuatro policías que habían sido retenidos por los manifestantes.
Los enfrentamientos, según el organismo humanitario, se produjeron cuando simpatizantes del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, apoyados por la Policía Nacional, intentaron desalojar a grupos de manifestantes civiles que mantienen barricada en esa ciudad.
La Policía de Nicaragua, en tanto, atribuyó esas muertes a “actos terroristas” del “crimen organizado, que alteraron el orden público, la paz y tranquilidad de las personas, familias y comunidades”.
Leiva indicó que ese informe ya fue compartido con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que ayer elevó a 127 el número de personas que han muerto en Nicaragua desde que el 18 de abril se iniciaron las protestas contra Ortega.
MERCADO EN REBELDÍA
Los comerciantes del mercado Oriental, el más extenso de Nicaragua, se declararon ayer en “desobediencia civil”, en protesta contra la “opresión” de Ortega.
“No vamos a pagar impuestos, sí vamos a garantizar el salario de los trabajadores, porque no vamos a permitir más imposiciones, no señor, esto se acabó, el 18 de abril Nicaragua se levantó en un grito de no más opresión y no más imposición”, dijo una portavoz de los comerciantes.
Con 84.6 hectáreas, más de 20,000 establecimientos, 2,000 vendedores ambulantes y unos 50,000 compradores diarios, el Oriental no solo es el mercado más extenso de Nicaragua, sino también de la región.
“Este mercado es un pilar de Centroamérica, le pedimos a nuestros proveedores internacionales, salvadoreños, guatemaltecos, peruanos, de zonas libres, que nos tengan paciencia, que la crisis nos afecta a todos por igual, pero saben que siempre se les ha pagado”, agregó la portavoz.
La amenaza de saqueos por parte de grupos afines a Ortega, así como los incendios que causaron en el mercado de Artesanía de la ciudad de Masaya fueron el detonante para la desobediencia civil.
“Muchos nos han dicho: nos van a quemar el mercado, como en Masaya, (pero) no tenemos miedo”, sostuvo la portavoz.