FGR investiga caso comedor en sede policial
El local de alimentos funcionaba en el edificio de subdelegación viroleña. Fue cerrado el martes, tras la captura del esposo de la propietaria.
La Fiscalía General de la República (FGR) confirmó ayer que ha abierto un expediente de investigación para determinar la presunta infiltración de pandilleros en un comedor que funcionaba en la subdelegación de la Policía Nacional Civil (PNC) de Zacatecoluca, La Paz, y que fue cerrado tras hacerse público el arresto del esposo de la propietaria del local, identificado como pandillero activo.
Fuentes fiscales aseguraron que inicialmente la investigación ha sido abierta de oficio por el delito de agrupaciones ilícitas, aunque indicaron que podría ser modificado durante el avance de las averiguaciones.
“El expediente se ha abierto por el delito de agrupaciones ilícitas, pero esta calificación es provisional, en el camino se puede modificar”, manifestó el fiscal encargado del caso.
Agregó que tienen información sobre diferentes “anomalías” que involucran a miembros de grupos Jueves 14 de junio de 2018 terroristas y que habrían ocurrido en la subdelegación de la Policía de Zacatecoluca con el aval de oficiales policiales.
“Nadie decía nada y por eso se había hecho difícil iniciar la investigación. En ese comedor se concentraban pandilleros, principalmente mujeres, y ‘marcaban’ a todo el que llegaba a la subdelegación”, afirmó el fiscal.
En el referido comedor compraban a diario los alimentos para sus parientes la mayoría de familiares de reos que guardan detención en las bartolinas policiales de la subdelegación, que son miembros de la misma pandilla a la que pertenece Najarro.
El comedor funcionaba en la cochera de la vivienda donde se encuentra la subdelegación policial. Muchos de los agentes destacados en esa sede de la Policía compraban también sus alimentos ahí, aunque hay otros comedores en la misma cuadra.
Con el cierre del local de comida se ha despejado la acera y habilitado una zona de parqueo para los vehículos de la corporación.
El caso se conoció luego de la captura del pandillero Roberto Antonio Najarro Nolasco, ocurrida el jueves pasado en la colonia San Carlos I, de Zacatecoluca, durante un control policial.
Al delincuente se le decomisó una pistola automática de la que no presentó la documentación respectiva ni la licencia para portarla.
Al momento de su arresto, Najarro iba acompañado de María Virginia Campos, quien manifestó ser su esposa y la propietaria del comedor que estaba ubicado en la sede policial.
Najarro fue acusado del delito de tenencia, portación o conducción ilegal de arma de fuego.
La audiencia contra el imputado, quien tiene tatuajes del número que identifican a la pandilla a la cual pertenece, se realizó el lunes anterior en el Juzgado Segundo de Paz de Zacatecoluca, que le decretó investigación sumaria y medidas alternas a la detención.
El juzgado le dio a la fiscalía 10 días para presentar el dictamen de acusación en contra de Najarro, para que se desarrolle el juicio en el mismo tribunal.