FGR acusa de simulación de delitos a Vanda Pignato
La ex primera dama enfrenta hoy una nueva audiencia. Según la fiscalía, simuló que le habían falsificado su firma, pero sí le compró un vehículo a “Mecafé”.
La ex primera dama de la república Vanga Pignato enfrentará hoy una nueva audiencia porque la Fiscalía General de la República (FGR) presentó una acusación en su contra por simulación de delitos, un delito que está completado en el artículo 304 del Código Penal. Pignato enfrenta el nuevo proceso en el Juzgado Octavo de Paz, a cargo del juez Carlos Béndix, quien programó la audiencia inicial para esta tarde.
Según la acusación fiscal, la secretaria de Inclusión Social le hizo creer a la fiscalía que alguien había utilizado su firma en la compraventa de un vehículo a José Miguel Menéndez, “Mecafé”, ahora procesado como parte de la trama de corrupción que el ministerio público le atribuye al expresidente Mauricio Funes.
Pignato, según comprobó posteriormente la fiscalía, sí firmó ese documento de compraventa del vehículo a “Mecafé”, pero para desmarcarse simuló que había sido víctima de la falsificación de la firma.
“Se cuenta con la muestra gráfica que de su puño y letra ella brindó ante el perito de la Policía Técnica y Científica de la PNC, y se tiene documentos por ella firmados en la Secretaría de Inclusión Social, todo para que sirviera como material de comparación”, explicó la fiscalía en su acusación.
Pignato ya es procesada por el delito de lavado de dinero. Según la fiscalía, lavó $165,000 provenientes de fondos públicos. Ese dinero, según la investigación fiscal, salió de los $351 millones que su exesposo Mauricio Funes, con la ayuda de su círculo cercano, sustrajo de la partida de gastos reservados de la Presidencia para pagar lujos, viajes e inmuebles.
La fiscalía requiere a dos familiares de Pignato como miembros de la supuesta red de corrupción: su hermana Christina Pignato y su cuñado, Thiago Carbajal, ambos son prófugos de la justicia.
El ministerio público ha dicho que probará que la ex primera dama hizo 142 viajes para ella y su familia con fondos públicos; que compró el carro Lexus, una casa en Altamira y que recibió miles de dólares en efectivo para sus gastos.
Funes y Pignato, según la fiscalía, le compraron un apartamento en una zona de lujo a la hermana y el cuñado de Pignato para que cuidaran al hijo de ambos.
La fiscalía también acusa al exasesor de Pignato Nelson Antonio García Cerón de no haber justificado más de $1 millón.
La ex primera dama fue procesada por enriquecimiento ilícito en la Cámara Segunda de lo Civil. Funes fue condenado y ella fue exonerada. Ese proceso actualmente está en apelación en la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), donde la fiscalía intenta probar que Funes presentó prueba falsa para librarse de ser condenado a resarcir un monto mayor.
EN EL ISSS
La ex primera dama fue trasladada desde el centro médico privado donde se encontraba hacia el Instituto Salvadoreño del Seguro Social. Según le informaron a la fiscalía, está ingresada en una unidad de neurología porque su diagnóstico es “neuropatía periférica secundaria a antineoplasicos más radiculopatía lumbosacra”.
El ministro de Seguridad, Mauricio Ramírez Landaverde, había evadido responder dónde tenían bajo custodia a Pignato, pese a que el Juzgado Quinto de Paz giró la orden de detención lue- go de realizar la audiencia inicial del caso denominado saqueo público. Cuando la fiscalía giró las órdenes administrativas de detención del caso, no incluyó a Pignato. Cuando el caso llegó a los tribunales, ella ingresó al Hospital de la Mujer. Después, cuando el juzgado ordenó capturarla, se trasladó a Climosal, en el municipio de Santa Tecla.