POLÉMICA POR RESPALDO DE SÁNCHEZ CERÉN A ORTEGA
El presidente salvadoreño consideró que hay intentos de alterar el orden constitucional y de derrocar a Ortega, pero 13 países de la región firmaron una carta que condena la represión.
El presidente de la república, Salvador Sánchez Cerén, expresó ayer en Cuba su apoyo al gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua, mientras que 13 países latinoamericanos exigieron ayer al régimen el cese a la represión y el desarme de los paramilitares luego de tres meses de manifestaciones que se detonaron el 18 de abril por una reforma de pensiones y que hoy piden a Ortega la renuncia del poder.
En su participación en el XXIV encuentro del Foro de Sao Paulo, que se desarrolla en La Habana, Cuba,
“Nos solidarizamos también con el Gobierno y el pueblo de la hermana Nicaragua ante los intentos desestabilizadores para alterar el orden constitucional”. SALVADOR SÁNCHEZ CERÉN, PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA
“No están solos, sufrimos con ustedes, sentimos su dolor y queremos que sepan que queremos hacerles sentir que compartimos su calvario”. GREGORIO ROSA CHÁVEZ, CARDENAL
el mandatario salvadoreño consideró que son intentos desestabilizadores para alterar el orden constitucional y derrocar al gobierno de Ortega.
“Nos solidarizamos también con el Gobierno y el pueblo de la hermana Nicaragua ante los intentos desestabilizadores para alterar el orden constitucional, derrocar por la fuerza al Gobierno legítimamente electo y arrebatar a la población los grandes avances sociales y económicos en uno de los países que alcanzó el mayor crecimiento y estabilidad en la región”, expresó Sánchez Cerén.
En contraposición, 13 países (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay) firmaron la declaración especial sobre la situación de Nicaragua que condena la violencia imperante.
Inmediatamente, las palabras de Sánchez Cerén provocaron reacciones en El Salvador. Los diputados de ARENA Margarita Escobar y Emilio Corea presentaron en la Asamblea Legislativa una iniciativa para que en la sesión plenaria de este viernes se apruebe un pronunciamiento que condene la violencia que se vive en Nicaragua y que ha causado casi 400 muertos y al menos 2,000 heridos, en su mayoría jóvenes y estudiantes.
Ante las declaraciones de Cerén, la diputada arenera Martha Évelyn Batres escribió en su cuenta de Twitter: “PERDÓN pueblo Nicaragüense, a las madres que lloran sus hijos, a los hijos que lloran sus padres, a los presos políticos, a los perseguidos, los que viven en zozobra en nuestro País hermano. La mayoría de salvadoreños NO pensamos como el Presidente aliado del régimen”, escribió.
El expresidente de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) y líder de la organización DECIDE, Jorge Daboub, le pidió al presidente Sánchez Cerén que hablara en nombre del FMLN, pero no podía apoyar “al dictador de Ortega en nombre de El Salvador”.
En el Foro de Sao Paulo, que aglutina a líderes de izquierda en América Latina, Sánchez Cerén abogó por una negociación para poner fin al conflicto y estabilizar la situación de violencia del vecino país.
“Respaldamos la decisión del presidente Daniel Ortega de mantener un diálogo respetuoso para encontrar acuerdos que permitan a esa hermana nación detener la escalada de violencia y continuar por la senda del progreso y mejoramiento de la calidad de vida de la población, en paz y con estabilidad democrática”, sostuvo.
Sin embargo, medios internacionales reportan que Ortega, lejos de retomar el diálogo y la negociación, desarrolla una ofensiva armada en la que policías y paramilitares mantienen un estado de sitio no decretado y bajo represión a los manifestantes.
El cardenal salvadoreño Gregorio Rosa Chávez anunció que la Iglesia ha iniciado una campaña de oración en solidaridad con el pueblo nicaragüense, la cual durará tres meses.
“No están solos, sufrimos con ustedes, sentimos su dolor y queremos que sepan que queremos hacerles sentir que compartimos su calvario ”, expresó el líder de la Iglesia católica del país.