Encuentran cadáver de vigilante desaparecido
Habría sido privado de libertad el miércoles pasado, luego de salir del trabajo en un supermercado de la ciudad de Zacatecoluca.
El cadáver de Gustavo Torres Mejía fue encontrado ayer, aproximadamente a las 8:30 de la mañana, en el kilómetro 58 de la calle a la rotonda, en las inmediaciones de la colonia El Carmen, de Zacatecoluca, La Paz. La víctima fue identificada por parientes, quienes manifestaron que Torres Mejía desapareció el miércoles anterior por la tarde luego de salir de un supermercado de Zacatecoluca, lugar donde trabajaba como vigilante.
“No sabemos qué fue lo que pasó. Él fue al trabajo, pero ese día (miércoles) ya no regresó. Nosotros pusimos la denuncia ante la Policía, pero hasta hoy (ayer) lo han hallado ya fallecido”, comentó un familiar de Torres.
La Policía Nacional Civil (PNC) informó que “el cadáver lo hallaron envuelto en una sábana y los hechores le habían colocado encima bolsas de nylon; tenía varios impactos de bala, incluyendo uno en la cabeza, y estaba en estado de putrefacción”.
Agregó que ya cuentan con algunas hipótesis sobre las razones del crimen, pero no se revelarían debido Sábado 21 de julio de 2018 a que se inician las investigaciones; sin embargo, que el ahora occiso trabajaba como vigilante es un elemento a considerar.
“No podemos decir ahora las primeras líneas de investigación, pero tenemos, por ejemplo, que él renunció a su trabajo el miércoles (día que desapareció) y que luego se habría ido a departir con un compañero que dos días antes también había renunciado”, dijo un oficial de la PNC.
La participación de las pandillas en cometer el asesinato tampoco se descarta, ya que en casos como estos, “ven a una persona vulnerable (bebiendo o confiada) y aprovechan para atentar contra ella, pero todo eso se va a confirmar o anular de acuerdo con las investigaciones”, agregó otra fuente de la PNC.
Los vecinos del lugar donde fue encontrado el cadáver aseguraron no haber visto ni escuchado nada sobre el caso, y agregaron que la zona es relativamente tranquila, ya que a unos 800 metros se encuentra el penal de máxima seguridad y las nuevas oficinas de la Policía, pero que el hallazgo los sorprendió.