Separan a 10 agentes Jaguares por violar derechos humanos
Autoridades policiales confirmaron el traslado a labores de seguridad pública, pero no los casos en los que cometieron la falta. Defienden que la depuración es para no permitir indisciplinas ni delitos.
Violar derechos humanos. Esa es la razón por la que 10 elementos de la Unidad Especializada Táctica Policial (UTEP), cuyos miembros son conocidos como Jaguares, han sido separados y enviados a cumplir labores de seguridad pública a distintas zonas del país. Se trata de la primera depuración que sufre la nueva unidad élite de la Policía Nacional Civil (PNC) en los casi seis meses que tiene de funcionamiento.
“Hubo el traslado de unos 10 elementos policiales, de febrero a la fecha, por unos casos de violaciones a derechos humanos... están en proceso de investigación. Ya están fuera de la unidad”, confirmó ayer Mauricio Arriaza Chicas, subdirector de Áreas Especializadas Operativas.
La UTEP fue creada el 14 de febrero pasado al fusionar a la Fuerzas Especializadas de Reacción El Salvador (FES) y al Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPES), y así sustituir al Grupo de Reacción Policial (GRP), la unidad élite disuelta luego del escándalo por la desaparición de la policía Carla Ayala.
La agente Ayala fue agredida de bala y desaparecida por un compañero policía, aún prófugo, tras una fiesta de fin de año donde hubo alcohol. Aunque las autoridades han dicho que con la evidencia recolectada es muy probable que ella esté muerta; su cadáver no ha sido encontrado siete meses y medio después.
Además de ese escándalo, algunos agentes del extinto GRP también han sido procesados por haber violado los derechos humanos al cometer ejecuciones extrajudiciales, en supuestos enfrentamientos con pandilleros.
El jefe de Jaguares, que pidió no ser identificado, dijo ayer que su misión con la UTEP es “limpiar y transparentar” el trabajo de la unidad.
“Se trata de agentes que se han visto en situaciones de viola-
ción de derechos humanos... Son denuncias que se han recibido a través de las instancias correspondientes a la unidad. A veces abusando del poder”, aseguró el jefe policial sin dar detalles de los casos.
Agregó que en cada circunstancia han seguido un proceso disciplinario de investigación, pero dijo que no podía dar “detalles de los procesos” que les han seguido a los agentes Jaguares separados.
Arriaza Chicas tampoco quiso dar pormenores de los casos o confirmar si se trata de nuevas ejecuciones extrajudiciales cometidas por policías élite.
El subdirector agregó que han creado instrumentos administrativos “para la selección, permanencia, entrenamiento y salida” de los Jaguares.
Una acción que había sido declarada por el director de la PNC, Howard Cotto, a inicios de semana, cuando aceptó que había iniciado un proceso de depuración de la nueva unidad; sin embargo, el director no quiso confirmar si ya habían separado a algunos elementos.
A pesar de la separación de la decena de agentes, Arriaza Chicas defendió la preparación de los elementos desde la selección porque “responde a un perfil profesional”. Dijo que cada miembro debe pasar por un curso básico y uno avanzado de “técnicas y tácticas policiales”.
Ese aprendizaje, de acuerdo con el subdirector, se basa en “hacer intervenciones a estructuras delincuenciales con el estricto respeto a los derechos humanos, porque eso no debemos dejarlo de lado”.
Agregó que los miembros que “hayan cometido o cometan” alguna infracción administrativa, disciplinaria o señalados por conductas de agresiones intrafamiliar son recomendados a un comité técnico para que vayan saliendo de la unidad”.
“Se han visto en situaciones de violación de derechos humanos. Son denuncias que se han recibido a través de las instancias correspondientes a la unidad. A veces abusando del poder”.
JEFE PNC DE JAGUARES