Modelo para hacer negocios a través de apoyo solidario
Holanda ha promovido la práctica de que jubilados compartan su experiencia con nuevos empresarios.
“Lo que ya produce El Salvador lo podemos exportar. Necesitamos encontrar la calidad correcta. Eso lo hablaremos con nuestros socios: ‘si puedes subir 20 % la calidad, podrás calificar para el estándar preferido”.
“La Cámara de Comercio de Holanda nace con la prioridad de exportar, pero también importar tecnología”. JUAN PABLO DURÁN, PRESIDENTE JUNTA DIRECTIVA NETHCHAM
del tema. Puede ser, simplemente, que no sea factible. No vamos a venderles sueños que no son realizables. Necesitamos probar que su producto es de buena calidad, que es deseado en Holanda y Europa, que tenga un precio atractivo.
Si no existe la posibilidad, como holandeses somos muy directos y le diremos ‘mire, es mejor concentrarse en Centroamérica’. Pero yo creo que el valor agregado que podemos vender en Europa es alto. En Centroamérica, cuando uno exporta, en la frontera va a un precio bajo, pero en Holanda el consumidor paga más. La mejor calidad de café, por ejemplo, va a Europa. No va a Starbucks, va a Europa. El cliente es muy crítico sobre calidad y está dispuesto a pagar más para esa calidad. Por eso tenemos que hablar con nuestros miembros (de la cámara) sobre calidad y cómo se puede mejorar.
Para Centroamérica, Holanda solo tiene una embajada. Han seleccionado a San José, Costa Rica. Pero en cada país hay un cónsul. Yo ya tengo cuatro años. Y aunque tengo que dedicar un poco de mi tiempo a temas consulares y a temas importantes para el Gobierno de Holanda, como la defensa de los derechos humanos –tenemos programas con el INMD para la democracia multipartidaria, de facilitadores judiciales manejado por la OEA–, pero, más que nada, dedico mi tiempo a la parte económica (es vicepresidente director financiero de Unicomer Group), porque soy un hombre de negocios. He sido banquero y contador público durante toda mi vida. Me fascina la oportunidad de negocios. Un embajador es un representante de su gobierno en el país, mientras que un cónsul, como en mi caso, tiene más libertad de explorar otras vías. En mi caso, económicas. Nosotros podemos ayudar con las instancias oficiales. El CBI (Centro Promotor de Importaciones) ayuda a importar a Holanda desde afuera. Muchos países tienen una agencia de exportaciones, pero Holanda tiene un programa de importación, porque el país es tan chiquito que para fabricar cosas no puede hacer todo adentro. Importan insumos, arman máquinas y luego las exportan. Holanda tiene un nivel de importación de $600,000 millones. Y un nivel de exportación aún más. Creo que de esos $600,000 millones si El Salvador logra obtener un décimo por ciento.
En la junta directiva de la Nethcham (Cámara de Comercio de Holanda en El Salvador) hay empresarios de todo nivel. Desde dueños de hoteles de playa, pasando por cafetaleros, cooperativistas y banqueros. “Somos una Cámara distinta, somos una Cámara gestora de negocios, que pretende hacer vínculos entre empresarios de El Salvador y de Holanda”, asegura el presidente de la junta directiva de la Nethcam, Juan Pablo Durán.
Para Durán, es clave una convivencia armónica entre los empresarios grandes, medianos y pequeños, algo que es usual en la sociedad neerlandesa. El principio es que “al pequeño hay que enseñarle; al mediano, motivarle; y al grande, ayudarle” a exportar.
El cónsul general del Reino de los Países Bajos, Peter Klingeman, explica que su papel en la Nethcham es darle seguimiento personalizado a los empresarios que decidan incorporarse.
Ya la historia de la cooperación holandesa en El Salvador incluye un componente de transferencia de experiencias. Se trata de PUM o, como es conocido en el país, “Sabios y Expertos”. Se trata de jubilados holandeses que vienen a El Salvador a transmitir sus conocimientos a empresarios jóvenes.
“Holanda es empático con El Salvador, hay que sacarle el máximo provecho. Para eso se necesita que el Gobierno de El Salvador facilite las exportaciones”, sostiene el presidente de la directiva de Nethcham.
La Cámara busca que el país pueda aprovechar todas las dimensiones del Acuerdo de Asociación con Europa. “Los TLC son fracasos, porque succionan las remesas. Nosotros somos la opción para emparejar la balanza. Desde Holanda podemos llegar a toda Europa”, señala Durán.
Klingeman hace énfasis en el CBI, el centro promotor de las importaciones de Holanda, creado para que empresas extranjeras lleven sus productos al que se ha convertido como el corazón de la logística exportadora de la Unión Europea.
De momento, señala el cónsul, el CBI está dando capacitaciones para productores de cacao, camarones, pescado, verduras y café. Hay mucha demanda, dice, pero hay que llegar con la calidad óptima. Sostiene que un holandés puede pagar más por mejor calidad, de modo que “no se le puede vender cualquier cosa”.