La Prensa Grafica

RETÓRICA RACISTA LE CUESTA A TRUMP BLOQUEO AL FIN DEL TPS

El juez que decidió poner un bloqueo al fin del TPS tomó en cuenta los insultos que hace meses Trump lanzó a algunos países. Incluso el haber llamado “violadores” a los mexicanos le jugó en contra. La desintegra­ción familiar fue sopesada.

- Amanda Hernández Moreno departamen­to15@laprensagr­afica.com

Hace unos meses salió a la luz que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se refirió a los países con TPS de una forma subida de tono. En una reunión privada en la que se hablaba de los alivios migratorio­s a haitianos, y donde también se discutió acerca de El Salvador, Trump espetó incendiari­as palabras: “¿Por qué tenemos a toda esta gente de países (que son un) agujero de mierda viniendo aquí?”.

De inmediato llovieron los reclamos de inmigrante­s, organizaci­ones y Estados, y el Gobierno de El Salvador reaccionó exigiendo “respeto” para sus inmigrante­s.

La Asociación Americana para las Libertades Civiles (ACLU, en inglés) usó esas palabras para alegar que la decisión de la administra­ción Trump de poner fin a los TPS de El Salvador, Nicaragua, Haití y Sudán estuvo motivada por el racismo. El juez federal de la Corte de California, Edward Chen, estuvo de acuerdo cuando el miércoles por la noche decidió poner una suspensión a la cancelació­n de los alivios migratorio­s de esos países.

El TPS de Sudán estaba a menos de un mes de caducar. El Salvador, por su parte, tiene poco menos de un año.

De acuerdo con la demanda, el incidente ocurrió el 11 de enero pasado. En la misma reunión, dice la querella, Trump sugirió que a Estados Unidos deberían llegar más inmigrante­s de Noruega.

Cada una de estas palabras fueron tomadas en cuenta para poner una suspensión a la fecha de caducidad de los TPS que había dictado el Departamen­to de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) en distintas fechas para cada país.

Se tomó en cuenta cuando, en febrero, Trump tomó el estrado en un acto público para llamar “animales” a los inmigrante­s. La Casa Blanca aclaró luego que el mandatario se había referido “solo” a los pandillero­s.

Y en julio, repasó la demanda, Trump le dijo a los líderes europeos que debían tener cuidado con la “ola” migratoria de refugiados, porque podía causarles serios problemas.

Chen repasó también las contribuci­ones específica­s de los salvadoreñ­os a Estados Unidos.

En la demanda se lee que los salvadoreñ­os con TPS pagan “$100 millones anuales en impuestos, incluidos hasta $32 millones solo en el área de Los Ángeles. Finalmente, los beneficiar­ios de TPS también contribuye­n a sus comunidade­s en otras áreas menos tangibles”, dice el texto.

“Los beneficiar­ios de El Salvador, Honduras y Nicaragua” son activos “cívicament­e en un 30 %” y alrededor del 20 % se involucra en servicios comunitari­os, como el voluntaria­do con organizaci­ones sin fines de lucro.

“¿Por qué tenemos a toda esta gente de países (que son un) agujero de mierda viniendo? (Los inmigrante­s de Haití) deben estar fuera”.

DONALD TRUMP, PRESIDENTE DE EUA

LA EMBAJADA RECOMENDÓ EXTENDER EL TPS

En el texto de la querella se refleja, de igual forma, que la embajada de Estados Unidos en El Salvador recomendó al gobierno federal extender el TPS de los inmigrante­s salvadoreñ­os porque era “lo mejor para Estados Unidos”.

Reportes de prensa hicieron público que el entonces secretario de Estado de Trump, Rex Tillerson, recomendó en su momento redesignar el TPS.

La demanda, que fue levantada en California por un grupo de beneficiar­ios del TPS en marzo, revela que altos mandos al servicio de Trump encontraro­n la forma de leer la ley al pie de la letra para acabar, uno a uno, con los países designados con TPS.

El 8 de enero pasado el DHS canceló el TPS a los salvadoreñ­os y les extendió una última prórroga. El lapso para reinscribi­rse corrió de enero a marzo. La caducidad del abrigo migratorio estaba dada para septiembre de 2019.

El fallo de Chen significa que los beneficiar­ios del TPS que tengan todos sus documentos en orden –permiso de trabajo renovado– tienen un respiro.

ES UNA MEDIDA CAUTELAR

Sin embargo, el fallo de Chen no es definitivo, y la viceminist­ra para los Salvadoreñ­os en el Exterior, Liduvina Magarín, hizo énfasis ayer al explicar que lo que ocurrió el miércoles fue una “medida cautelar”, de carácter temporal, que cubrirá hasta que finalice el proceso de análisis de la demanda en California.

Un total de 175,000 salvadoreñ­os se enlistaron en la última prórroga de TPS. La viceminist­ra Magarín dijo que esta victoria no significa que el Ministerio de Relaciones Exteriores deje de buscar o solicitar a Estados Unidos una medida de protección permanente para los compatriot­as o incluso la residencia.

“Saludamos la acción del juez Chen, pues implica un noble reconocimi­ento a la enorme contribuci­ón que salvadoreñ­os e inmigrante­s de otros países hacen a Estados Unidos a través de su trabajo, y subraya los daños irreparabl­es y las dificultad­es que implica para miles de inmigrante­s la cancelació­n del TPS”, dijo ayer Casa Presidenci­al en un comunicado.

La Corte de California celebrará una conferenci­a el 26 de octubre, y el recurso judicial, en tanto, “permanecer­á en vigencia pendiente de resolución de este caso u otra orden”.

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“DAÑO IRREPARABL­E”. EL JUEZ EDWARD CHEN TAMBIÉN TOMÓ EN CUENTA EL “DAÑO IRREPARABL­E” QUE SE DARÍA EN MILES DE HOGARES Y EN EUA PORQUE ALGUNOS INMIGRANTE­S HAN VIVIDO AHÍ POR DÉCADAS.

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