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hoja de respuestas que será entregada al Ministerio de Educación.
Amanda Miguel cuenta que ella comenzó a perder la vista cuando estudiaba séptimo grado en la Dolores C. Retes; a pesar de la dificultad que le ocasionaba decidió continuar sus estudios en el sistema regular. Para seguir en la escuela se apoyó en su hermana y juntas repasan y estudian todos los temas que reciben en clases.
“Mi hermana es mis ojos y mi bastoncito. Juntas queremos estudiar Ciencias Jurídicas y para ello necesitamos que nos otorguen becas”, dice la joven, que procede de una familia de escasos recursos, y luego añade: “Mi mensaje para las personas es que aunque tengan dificultades en la vida siempre sigan luchando”.
“Ella venía con dudas que yo no la iba a recibir. La responsable de ella y la hermana me pidieron que las dejara juntas y así quedaron”. RENÉ REYES LARIOS, DIRECTOR DEL INIM
LA ADMIRACIÓN Damarys Elizabeth, por su parte, dice que admira a su hermana, por la tenacidad que ha demostrado y por no dejarse vencer a pesar de haber comenzado a perder la vista cuando apenas era una niña de siete años y de quedar ciega a la edad de 15 años.
“Mi hermana es una luchadora. Es bien inteligente y estudia bastante y para eso yo le ayudo. En el instituto nos han recibido bastante bien y nuestra meta es seguir estudiando”, dice la joven y agrega que ambas están aprendiendo el sistema braille, para poder ingresar a la universidad y hacer realidad el sueño de convertirse en abogadas.
René Reyes Larios, director del INIM, explica que hace dos años la madre de las jóvenes llegó a matricular a sus mellizas, con el temor de que rechazaran a Amanda Miguel, por ser ciega.
Añade que la ceguera de la chica no fue ningún impedimento para matricularla, por lo que las hermanas ingresaron al bachillerato general y desde entonces han sido un par de estudiantes aplicadas, sobre todo Amanda Miguel, que debe realizar todas las pruebas y exámenes de manera oral.
“Ella venía con dudas que yo no la iba a recibir. La responsable de ella y la hermana me pidieron que las dejara juntas y así quedaron. Ella es ejemplar, venía con notas de 9 y 10 de la escuela y ha seguido con buenas notas en el bachillerato”, dice Larios.
En el departamento de San Miguel se sometieron a la PAES un total de 6,037 estudiantes que fueron diseminados en 31 sedes a las que asistieron estudiantes del sistema de educación regular, a distancia, semipresencial y de educación especial.