MÉXICO DEPORTA A 98 MIGRANTES Y CERCA ALBERGUE CON ANTIMOTINES
Los migrantes que lograron entrar a EUA en medio del caos fueron detenidos. El presidente Donald Trump justificó ayer el uso de gas lacrimógeno en la frontera.
México deportó a 98 migrantes que presuntamente protagonizaron una trifulca al romper este domingo un cerco de la Policía Federal en la ciudad de Tijuana con el afán de cruzar la frontera con Estados Unidos, informó ayer el Instituto Nacional de Migración (INM).
“Anoche fueron 98 personas puestas a disposición del Instituto Nacional de Migración o aseguradas por personal del Instituto y han sido deportadas”, explicó en una entrevista en Televisa Gerardo García Benavente, comisionado del INM.
El funcionario explicó que estos datos son “preliminares” y relató que las 98 personas son en su mayoría hondureñas.
La cancillería salvadoreña confirmó ayer que no tuvo reportes de connacionales involucrados en los hechos del domingo.
García Benavente recordó que el INM “cuenta con mecanismos de deportación y de retorno asistido para hacer abandonar el territorio nacional a los extranjeros que violenten” las leyes migratorias.
En tanto, 42 inmigrantes fueron detenidos este domingo en territorio estadounidense luego de que cruzaron por la fuerza la frontera, informó ayer Rodney Scott, jefe de sector de la Patrulla Fronteriza en San Diego (California).
El grupo, que formó parte de una manifestación realizada en suelo mexicano, habría atacado con piedras a oficiales que resguardaban la barda que divide los dos países en la zona californiana de San Ysidro, por lo que se vieron obligados a responder con el uso de gas lacrimógeno, detalló Scott.
Por su parte, el presidente Donald Trump defendió ayer el uso de gas lacrimógeno para dispersar a las personas, al tiempo que aseguró que no hubo menores de edad afectados, a pesar de que varias fotografías mostraron a niños huyendo junto a sus padres.
ENCERRADOS
Fuerzas federales mexicanas establecieron ayer un cerco al principal albergue de los migrantes
que han llegado a la fronteriza ciudad de Tijuana.
Los agentes llegaron en al menos una decena de autobuses con capacidad para unos 50 pasajeros cada uno y fueron desplegados con equipo antimotines en las inmediaciones de la unidad deportiva Benito Juárez, donde hasta el domingo en la noche se registraron 5,632 migrantes albergados.
El comisionado de la Policía Federal, Manelich Castilla, explicó ayer a periodistas después de un recorrido por el complejo deportivo que la presencia adicional de la corporación en Tijuana “es parte de las instrucciones precisas que dio ayer el secretario de Gobernación (Alfonso Navarrete)”.
Algunos centroamericanos se han acercado a los oficiales de la Policía Federal al enterarse de que se les está brindando transporte a Tapachula, en el estado de Chiapas, donde son atendidos en un albergue y posteriormente transportados a sus países.
“Me voy porque veo la situación cada día más difícil. No tengo dinero ni quién me ayude de allá para gastar”.
HONDUREÑO,
ACEPTÓ SER DEPORTADO DE MÉXICO
“Se trata de salvaguardar los derechos humanos de los migrantes sin que en ello se justifique el quebrantamiento del orden”.
MANELICH CASTILLA,
POLICÍA FEDERAL DE MÉXICO