Facturación electrónica requiere reforma legal
El Código Tributario y la Ley del IVA hablan de documentos en físico. Expertos consideran que deben adecuarse a la factura electrónica para evitar contradicciones y mejorar la recaudación fiscal.
RICARDO LÓPEZ ARANIVA, FIRMA BENJAMÍN VALDEZ & ASOCIADOS
El Gobierno de El Salvador anunció recientemente que iniciará la implementación del sistema de la facturación electrónica, luego de que la Asamblea Legislativa aprobó un préstamo de $30 millones, otorgado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para ello. La factura electrónica es vista por Hacienda como una forma de mejorar la recaudación fiscal, reducir problemas de evasión y corrupción, y facilitar la actividad comercial. Sin embargo, expertos en temas tributarios señalan que para que sea exitosa se deben adecuar varias leyes actuales, como el Código Tributario y la Ley del IVA, puesto que estas hablan solo de documentos en físico.
En pocas palabras, sin los respectivos ajustes legales, los contribuyentes tendrían que emitir tanto la factura electrónica como la física para no caer en un incumplimiento y ser sujeto de multas u otras sanciones por parte de Hacienda. Eduardo Amaya, de Auditaxes El Salvador, puso como ejemplo los artículos del 110 al 114 del Código Tributario, que hablan de la documentación legal que debe emitirse, como factura,
ticket o crédito fiscal.
“Una condición importante es que el contribuyente está obligado a emitir y entregar documento, esto se cumple con la factura electrónica porque está supeditado a la factura electrónica que llegue. Pero entre el 110 y el 114 del CT se habla de la impresión de documentos, entonces siempre deben imprimirse. Hay que hacerse esa modificación”, indicó Amaya.
Algo que sí contempla ya el Código Tributario es que la documentación llegue en línea a la administración tributaria, que la factura electrónica se cargue al servidor de Hacienda.
Sin embargo, existen otras disposiciones legales que pueden jugar en contra del contribuyente. Por ejemplo, la Ley del IVA establece que debe entregarse original y copia de los créditos fiscales al comprador, y el vendedor se queda también con un juego para control interno.
“Son temas que deben armonizarse. Alguien podría decir que hay contradicciones, por ejemplo, para hacerse una deducción de un crédito fiscal basado en una factura electrónica”, agregó Amaya.
PROPONEN COMISIÓN
Por su parte, Ricardo López Araniva, tributarista de la firma Benjamín Valdez & Asociados, dijo que se han aprobado recursos para echar a andar el proyecto de facturación electrónica, la modernización de equipos de Hacienda para tener una plataforma tecnológica fuerte y robusta que la soporte, y tener control sobre la facturación en vivo de las operaciones que se estén realizando, pero que en asuntos de orden tributario concurren, además de lo técnico-contable, el ámbito legal.
“Necesitamos una adecuación de la legislación tributaria para su implementación, y la lógica contable, la dinámica de cómo se va a tratar esta facturación. Queda pendiente la reforma al Código Tributario, que está hecho para facturación manual”, acotó.
La administración tributaria se basa en el principio de aplicación de la ley, “el peligro es que cuando se muestre la facturación electrónica se pida el documento impreso, como dice la ley, y entonces se hace acreedor de una multa del 30 % del valor facturado”, agregó.
Para López Araniva, la adecuación de la ley garantizará la seguridad jurídica para los contribuyentes en general. “Básicamente habría que reformar la parte de documentos para el control del IVA, del 107 al 115 del Código Tributario, porque regula una facturación en papel con la concurrencia de las imprentas y la autorización de correlativos, algo que no se dará con la facturación electrónica”, detalló.
Uno de los objetivos de la facturación electrónica era facilitar las ventas a distancia, pero sin la modificación de la ley, aún se requerirán firmas en documentos en físico.
El Salvador tiene la ventaja, en este sentido, de que ya se cuenta con una Ley de Firma Electrónica, que en opinión de López Araniva puede amarrarse a la factura electrónica.
Actualmente se desarrolla un plan piloto para el sistema de facturación electrónica, en el que participa una decena de empresas que siguen requiriendo, sin embargo, la factura física, tal cual manda la ley.
“El plan piloto estaba más enfocado en probar la capacidad de recibir información por parte de la administración tributaria. Sin las reformas, a la par de la factura electrónica siempre habría que presentar la física”, insistió el tributarista.
Propuso que se cree una mesa de trabajo para consultar la mejor forma de hacer estas adecuaciones legales. “Creo que la facturación electrónica va a ayudar a controlar el tema de evasión fiscal y a mejorar el control sobre los contribuyentes, pero debe hacerse bien”, sostuvo.