México está dispuesto, pero no listo para albergar a más migrantes que van hacia EUA
El país ya alberga a miles de centroamericanos de diferentes caravanas.
y, además, se hizo de una familia.
“Ahora las cosas no son fáciles aunque se quede en el país y se esconda. Me arrestaron en 2017, como ya tenía una orden por la falla del proceso, me deportaron casi de inmediato a principios de este año”, recuerda.
Por miedo a las amenazas que había sufrido, Jónathan no fue a su pueblo en Chalatenango. De San Salvador viajó hacia Honduras, donde vive su padre, con la idea de empezar de cero en ese país y de encontrar un trabajo que le permitiera mantenerse. Pero las cosas tampoco le fueron bien.
“Pasé tres meses buscando trabajo, pero no encontré nada”, continúa narrando.
En octubre, cuando escuchó de la caravana de migrantes hondureños, Jónathan pensó que podía aprovechar el momento para llegar por su cuenta a Estados Unidos y decidió emprender nuevamente el viaje. En Guadalajara, se encontró con un grupo de la caravana que lo invitó a caminar con ellos. Pero decidió continuar solo.
“Cuando me encontré con ese grupo que iba a unirse a la caravana, me dijeron que me fuera con ellos, pero como he sido deportado y yo fallé en mi proceso en Estados Unidos, yo sé que al llegar a la frontera no me iban a recibir. Esas cosas son las que le explican a uno los abogados, que con faltas como esas uno no tiene oportunidad y decidí continuar el camino solo, pensando que podía pasar por algún punto ciego”, dice Jónathan.
El camino no fue fácil. Como muchos inmigrantes, este salvadoreño sufrió las consecuencias de la migración. Fue víctima de robo, lo golpearon y lo dejaron sin nada. Jónathan dice que el trato que recibió de algunos mexicanos que están en contra de los inmigrantes también le impactó profundamente.
Según Javier Martínez, director de la Casa de Migrantes de Saltillo, en las últimas semanas, muchos inmigrantes que han estado en la frontera aguardando pasar para solicitar asilo en Estados Unidos, están optando por entregarse en México.
Los que deciden entregarse, buscan apoyo en organizaciones como la Casa del Migrante de Saltillo. Ahí les ayudan con la documentación que deben presentar. Una vez iniciado el proceso no pueden salir de la ciudad donde entregan toda la documentación hasta que este finalice, y mientras se desarrolla reciben permiso de trabajo y permiso para permanecer en el país sin ser detenidos. La disponibilidad de México de aceptar a migrantes que quieren solicitar asilo en Estados Unidos mientras se procesan sus peticiones parece ser otro indicio de la luna de miel en boga entre el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y su homólogo estadounidense, Donald Trump. Aunque esto también preocupa a algunos funcionarios que ya tienen a miles de migrantes centroamericanos en sus ciudades fronterizas.
México hubiera podido simplemente rehusarse a aceptar a migrantes no mexicanos, tal como lo ha hecho históricamente. Pero el anuncio de esta semana, de $10,600 millones en ayuda estadounidense para desarrollo, y la relación entre ambos presidentes al parecer allanó el camino. Es la misma relación que ayudó a resolver las negociaciones varadas sobre el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá.
“Ahorita es una luna de miel, en
“Con todos los obstáculos logré llegar a Tijuana, pero me llevé una desilusión. Ahí hay albergues en los que les ayudan a los inmigrantes de las caravanas, pero en realidad no es así”. JÓNATHAN, MIGRANTE SALVADOREÑO “La semana pasada recibimos a 50 y para esta semana estamos esperando a otros 150 migrantes. La mayoría son hondureños y salvadoreños, hay un grupo pequeño de guatemaltecos”. JAVIER MARTÍNEZ, DIRECTOR DE LA CASA DE MIGRANTES DE SALTILLO
parte porque está uno más a la izquierda y otro más hacia la derecha, tienen cosas en común, como el proteccionismo, el de antisistema, el antiestáblisment, el nacionalismo de cada uno”, dijo José Antonio Crespo, analista político del Centro de Investigación y Docencia Económicas de México.
Crespo resaltó que Trump se lleva mejor con López Obrador que con su predecesor conservador, Enrique Peña Nieto.
“Hasta ahorita hay una luna de miel. ¿Cuánto va a durar? Quién sabe”, agregó Crespo.
México, entre tanto, tiene problemas para decir cómo albergará y protegerá a una población que podría sumar decenas de miles de migrantes centroamericano que podrían terminar en sus ciudades fronterizas con Estados Unidos.
Ciertamente no está listo para albergar a tantos migrantes.
Tonatituh Guillén, jefe de la Agencia Migratoria de México, dijo: “En el corto plazo, el Instituto Nacional de Migración no tiene la capacidad para operar este tipo de programa... La legislación que nos regula, que es la ley de migración, tampoco nos favorece”.
México ya está albergando a miles de centroamericanos que llegaron como parte de las caravanas.
TIJUANA ES EL CRUCE FRONTERIZO MÁS POPULAR ENTRE LOS MIGRANTES QUE ESTÁN ALLÍ ESPERANDO PRESENTAR SUS SOLICITUDES DE ASILO CON LAS AUTORIDADES MIGRATORIAS, PERO LA CIUDAD FRONTERIZA YA PARECE PREOCUPADA POR PROBLEMAS DE VIVIENDA DESPUÉS DE QUE EN NOVIEMBRE LLEGARON MÁS DE 7,000 MIGRANTES.