Conocen en campo sobre tecnologías agroecológicas
Productor de hortalizas afirma que 80 % de productos usados en plantaciones es libre de químicos.
La agencia de extensión del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal Enrique Álvarez Córdova (CENTA), en Candelaria de la Frontera, Santa Ana, contó experiencias y mostró resultados a través de un día de campo sobre la adopción de tecnologías agroecológicas implementadas con el proyecto “Biofertilizantes en cultivo de maíz, frijol y café como alternativa agroecológica para una producción sostenible en El Salvador” (CENTA Biofertilizantes), realizado en el cantón Santa Cruz, de Santiago de la Frontera.
A la actividad asistieron familias productoras de los municipios de Santa Cruz, Candelaria y Santiago de la Frontera, de Santa Ana, y realizaron un recorrido por cuatro estaciones; en cada una de ellas los técnicos expusieron sobre el cultivo del tomate, uso de microtúnel en chile dulce, riego por goteo y elaboración y aplicación de bioinsumos.
Rónald Martínez, coordinador de la agencia CENTA en Candelaria de la Frontera, explicó: “Hemos realizado este recorrido para que los asistentes puedan intercambiar conocimientos y escuchar las experiencias del uso de bioinsumos en los diferentes cultivos, queremos que conozcan las tecnologías que les permiten estabilizar y recuperar la microbiología de los suelos”.
El día de campo fue realizado en la parcela de Wilfredo Colindres Montejo, un joven productor que se siente muy motivado de cultivar hortalizas aplicando la mayoría de productos agroecológicos que aprendió a elaborar con la asistencia técnica del CENTA.
En el lugar se observó una plantación de tomate a cielo abierto y chile dulce en microtúneles, a los que se les aplicó productos como el bocashi, caldos bordelés, microorganismos sólidos, líquidos y los foliares, que son los que más le han gustado a Wilfredo, según comentó.
“Hemos usado una parte mínima de agroquímico, podría decir que el 80 % de productos usados en estas plantaciones es orgánico que me han enseñado los del CENTA. Lo que más me agrada de estos productos orgánicos es que son más saludables para mí y para los consumidores de mi producción; también es más económico porque los elaboramos de materiales que tenemos a nuestro alcance”, agregó el productor.