Panamá recibe al mundo en la Jornada Mundial de Juventud
Ya comenzaron algunos eventos. La JMJ inicia el 22 de enero y finaliza el 27. El papa Francisco estará presente por cinco días. Como san Romero del Mundo se refieren en la página oficial al copatrono.
Panamá se apresta a vivir la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en la que san Óscar Arnulfo Romero es uno de los copatronos, en una intención del Vaticano de relanzar una doctrina social comprometida con los pobres, “con la periferia” como ha dicho en repetidas ocasiones el papa Francisco, al hacer un llamado a los sacerdotes. Romero, que fue canonizado el 14 de octubre del año pasado, es para muchos en la Iglesia católica el santo joven cuya doctrina sigue vigente en las circunstancias sociales, políticas, económicas y religiosas del mundo.
El arzobispo salvadoreño, que fue asesinado el 2 de marzo de 1980, en plena guerra civil y por un escuadrón de la muerte, representa para el papa Francisco el ejemplo de martirio, de dar la vida por la Iglesia. Así lo ha externado el pontífice en diferentes ocasiones.
La JMJ en Panamá representa la tercera edición en Latinoamérica, la primera fue en Buenos Aires, Argentina, en 1987; la segunda en Río de Janeiro, Brasil, en 2013 y que es además la primera de Francisco.
El continente americano tiene una edición más que fue en Toronto, Canadá, en 2002.
Panamá ya inició lo que ha llamado la fiesta más grande en la historia de este país. Hace tan solo unos días fueron presentados el coro y la orquesta oficial de la JMJ, que interpretó, en un centro comercial de la capital panameña, varias canciones católicas e incluso himnos de ediciones anteriores.
“He aquí la sierva del Señor” se denomina el himno oficial de Jornada 2019, que también fue cantada por todos los presentes en el acto.
Otro evento muy significativo se realizó en la Unites
“Monseñor Romero es el primer santo de Centroamérica y es modelo de justicia, verdad y paz, es un modelo para los jóvenes, por eso fue nombrado como copatrono”.
SANTOS BELISARIO HERNÁNDEZ, ASESOR DE LA PASTORAL JUVENIL
versidad Santa María La Antigua (USMA), donde se izó la bandera de la Jornada Mundial de la Juventud 2019. El evento significa tener “presente, en todo momento, el espíritu de acogida y de servicio que se está desarrollando en todo el campus los días previos”, dice un despacho noticioso de prensa de la JMJ.
La USMA acogerá a más de 700 jóvenes peregrinos que estarán presentes y que podrán recibir las catequesis sin ningún contratiempo.
La universidad fue de las primeras instituciones académicas en ofrecer sus instalaciones, otras también han brindado sus establecimientos para recibir a diferentes jóvenes de distintas par- del mundo que estarán en suelo panameño entre el 22, cuando inicie la Jornada, hasta el 27 de enero, cuando llegue a su final.
Según confirmó monseñor José Domingo Ulloa, arzobispo de Panamá, este país espera la visita de unos 100,000 jóvenes de unos 140 países del mundo, que junto a los locales podrían llegar a un millón de participantes en la JMJ.
El prelado dice que la designación panameña obedece a un deseo del papa “para dar la oportunidad que jóvenes especialmente de las periferias de la región y el Caribe puedan tener la oportunidad de participar de este evento único”.
SAN ROMERO, EL COPATRONO
Ulloa ya había dicho que desde el primer día que les asignaron la Jornada Mundial de este año habían pensado en Óscar Romero como copatrono; para él, llegaría como beato, pero el 14 de octubre de 2018 cambió la historia y fue decretado santo por el papa Francisco, lo que para el prelado panameño tiene una mayor significación.
Días atrás el arzobispo expresó a LA PRENSA GRÁFICA en Panamá: “Hoy más que nunca sigue vigente en el caminar del mundo entero, pero espe-
cialmente de esta región centroamericana, yo creo que hoy Romero se haría las mismas preguntas que se hizo en aquel entonces, ¿por qué la pobreza, por qué la migración, por qué el narcotráfico, por qué tantas cosas?, y al final el llamado de paz y el compromiso de trabajar juntos por una Iglesia y una sociedad nueva”.
De hecho en la página oficial de la JMJ al referirse a los copatronos designados, asegura acerca del que llama san Romero del Mundo: “La trascendencia del primer arzobispo mártir de América vence cualquier tipo de barrera geográfica y cultural, y se ha convertido en símbolo del cristianismo contemporáneo. Su muerte coronó una vida de seguimiento de Cristo, opción decidida por el Reino de Dios y su justicia, escucha de la palabra, fidelidad, valentía, sentido de Iglesia y servicio al pueblo”.
El padre Santos Belisario Hernández, asesor de la Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis de San Salvador, asegura que la jornada tiene carácter regional y en tal sentido Romero representa al primer santo centroamericano. El sacerdote aclara que si bien en Guatemala fue canonizado por el papa san Juan Pablo II san Pedro de Betancourt, este era de origen español.
“Monseñor Romero es el primer santo de Centroamérica y es modelo de justicia, verdad y paz, es un modelo para los jóvenes, por eso fue nombrado como copatrono de la Jornada Mundial de Juventud; como modelo de justicia, de santidad y verdad”, asegura Hernández.
En julio del año pasado, la Iglesia católica salvadoreña entregó a Ulloa una reliquia (un trozo de costilla) de san Óscar Romero, que estará presente en las misas que el papa Francisco realice en la JMJ panameña.
La entrega fue realizada por el postulador y vicepostulador diocesano para la causa de canonización, monseñor Rafael Urrutia y padre Edwin Henríquez, respectivamente. Mas tarde también fue enviada una urna para que se realicen varias peregrinaciones por las diferentes diócesis de este país centroamericano.