Agradable sorpresa, un discurso improbable
El presidente electo Bukele sorprendió con el resultado de su gira a México y Estados Unidos, resalta notablemente su discurso en The Heritage Foundation, por el contenido absolutamente conservador, libertades, oportunidades no ayuda, que desarrolló extensamente, respondió preguntas fluidamente en inglés y discurso. Si ese es su camino tendrá apoyo real.
La noticia del momento es sin duda la gira a México y EUA, énfasis en el discurso del presidente electo Bukele en The Heritage Foundation y la programación de reunión para buscar acuerdos en puntos comunes con Mauricio Interiano, presidente del COENA.
The Heritage Foundation es una organización estadounidense que promueve políticas públicas de derecha conservadora, tanque de pensamiento muy influyente, su objetivo como ellos lo declaran es “promover la difusión de los principios de libertad individual, gobierno limitado, libertad de empresa, la defensa nacional y valores estadounidenses tradicionales”. Su peso específico es significativo y sus miembros agudos pensadores y analistas.
Dados los antecedentes de militancia y haber sido funcionario del FMLN y algunos discursos de campaña en que declaró, palabras más o menos que “su corazoncito es de izquierda”, escoger a la Heritage para lanzar un mensaje conservador hubiera parecido improbable. Sin duda él y sus asesores escogieron bien el auditorio, con el discurso que llevaban, esa caja de resonancia es potente y tiene mucha credibilidad. Los liberales la oponen pero la respetan.
Igualmente parecía improbable el discurso del electo, diferente de su contenido de campaña y de funcionario. Allá fue conservadurismo puro, consistente con la doctrina, como anillo al dedo para el auditorio, democracia, libertades, crecimiento económico atracción de inversión haciendo el país atractivo removiendo obstáculos, amigable al inversionista, combate a la corrupción, oportunidades para todos, no pidiendo ayuda a EUA sino negocios e inversión, nivelar el piso para que los salvadoreños talentosos residentes en el mundo que ganan bien encuentren El Salvador atractivo para regresar, repatriación de talentos, oportunidades para todos.
El discurso parecía improbable, pero se dio y es una agradable sorpresa que no esperábamos y representa lo que casi todos queremos. Si logra la mitad de lo que ofreció, el país corregirá el rumbo y puede pasar a la historia como un buen presidente y más.
El discurso bien estructurado y pensado, pero más impresionante fue la forma en que manejó una larga sesión de preguntas y respuestas. En campaña se manejó que él no hablaba en público sin tablet o teleprompter; sorprendió respondiendo de manera fluida, en buen inglés estadounidense, consistente en la estructura y el discurso, todas las preguntas. Sorprendió que con su reputación de prepotente y hasta malcriado, sus repuestas fueron suaves y empáticas. De nuevo, sorpresa agradable.
El contenido de su oferta si bien nos gusta y al menos debe servir de norte al país, es muy complejo de lograr, unas cosas más complejas que otras por supuesto. Seguridad y crecimiento económico a la cabeza en dificultades.
Si bien en seguridad, prioriza sin llamarla por su nombre, la Prevención y la Rehabilitación, 5 años es muy poco tiempo y tanto en esto como en todo, solo no puede. En seguridad la existencia del Consejo Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana, con su composición ultra plural acompañado de las NN. UU., OEA y la cooperación internacional, le da mucha fuerza y legitimidad a las acciones en este tema que emprendan las diferentes instituciones del Estado y privadas y ante la población y la comunidad internacional. No lo mencionó en su intervención, es de esperar que le dé continuidad a algo que está diseñado para ser Plan de Nación, el CNSCC y el Plan El Salvador Seguro, con las adaptaciones o modificaciones que sean pertinentes. Todos coinciden que es un buen plan, las quejas son en la ejecución, que es lo que corresponderá a su gobierno.
El combate al lacerante problema de la migración forzada es enfocado correctamente, arreglando nuestros países para que no tengan que irse los afectados. La aproximación multilateral de varios países constituyéndose en una gran zona productiva suena bien.
Dicen que el hombre es prisionero de sus palabras, esperamos por el bien del país que ese sea el caso.