El Sonsonate detuvo la racha triunfal del FAS :
El Sonsonate impidió al FAS sumar su quinta victoria al hilo y estableció otro punto de distancia entre ellos y el Firpo, igualando además al Jocoro.
Nada puede criticársele al FAS; si los pupilos de Dowson Prado no están celebrando su quinta victoria al hilo de un torneo en el que ya son cuarto lugar fue por la tenacidad del Sonsonate.
El cuadro cocotero guapeó en su visita al Arturo Simeón Magaña de Ahuachapán. Pese a sus serios problemas administrativos, que se resumen en que no saben si alguien les pagará, ayer el plantel que dirige el uruguayo Rubén “Polillita” da Silva exhibió máxima concentración defensiva, y hasta pudo llevarse mayor premio que el puntito, en el que fue su tercer juego sin derrota, ahora a seis puntos del Firpo e igualado con el Jocoro en la acumulada, en el penúltimo de la campaña 2018-2019.
El talento con la pelota del FAS fue de nuevo obvio, cada vez con mejor propuesta, con un entendimiento notable en su media; pero cuando estás en la posición del Sonsonate, hay imponderables difíciles de entender, como el orgullo.
Sí, la pelota fue tigrilla. Dustin Corea, Juan Carlos Moscoso, Jorge Morán, Juan Aimar y Guillermo Stradella fueron demasiado en tal sentido.
Stradella generó la más clara para los tigrillos en la etapa inicial. Desde la banda derecha, el suramericano recibió un balón y lo conectó con violencia, pero se estrelló en uno de los exigidos defensas cocoteros.
Juan Carlos Moscoso, una de las variantes de Dowson Prado, lució como en mejores tiempos, capaz de llevar el balón por todo el carril izquierdo. El veterano se prodigó en centros, pero en ninguno generó suficiente ventaja para el chileno Álvaro López.
Irse 0-0 al descanso fue un incentivo para el Sonsonate, que se guardó lo mejor para el final.
Seguiría el FAS su asedio en el segundo tiempo, pero la línea de cuatro visitante, liderada por Jónathan Barrios y Edson Meléndez, se lucía cada vez más.
Paseaba el local el balón por toda la cancha, con buen pie, con ritmo, pero cuando mejor lucía, el Sonsonate lo castigó.
Al minuto 60, el cafetero Daley Mena se robó un balón en el mediocampo y lo cedió para Armando Polo, quien se quitó la
marca del portero asociado Nicolás Pacheco para definir.
Ahí, al fin el FAS tuvo el ojo del tigre. El ojo y a David Rugamas, quien solo tenía un minuto de haber ingresado al campo.
Rugamas recibió un balón a
las espaldas de los zagueros cocoteros y definió preciso ante la salida de Luis Chamagua apenas tres minutos después del gol en contra. Denotó el FAS un carácter que le hizo falta en otras fechas, cuando estar abajo en el marcado fue sinónimo de derrota pese a la posesión, ante el Santa Tecla por ejemplo.
Tuvo varias más para definir, pero no sería otra tarde victoriosa, no habría quinta al hilo.
A los 74 minutos, Dustin Coreas recibió un balón por la banda derecha para cabecear, pero el toque se fue desviado.
Ni con el ingreso de Víctor García y atacando hasta con seis hombres encontraría el FAS la llave para abrir la puerta de un Sonsonate valiente.
“Me voy contento con el trámite, no el resultado. En el fútbol hay que concretar las que se tienen”. DOWSON PRADO,
TÉCNICO DEL FAS
“Hay jugadores que no tienen para entrenarse, colegas que tienen hijos y no tienen qué llevarles”. ARMANDO POLO,
DELANTERO DEL SONSONATE