CUESTIONAMIENTOS
La Línea 2 del Metro de Panamá, que entró en servicio este jueves, contribuirá a un aumento de la productividad laboral y mejorará la calidad de vida de casi medio millón de personas, en lo que constituye todo un hito en un proyecto de infraestructura, de acuerdo con expertos consultados por Acan-efe. La segunda línea del suburbano de Panamá, el primer país de Centroamérica con esta infraestructura, recorrerá 21 kilómetros, de este a oeste la periferia de la capital, hasta conectar con la línea 1, que viaja de norte a sur, en San Miguelito.
Es considerada la obra “emblemática” del gobierno del presidente Juan Carlos Varela, con una inversión de $2,130 millones, $273 millones más de los originales $1,857 millones firmados en el primer contrato en 2015.
Esa suma adicional se incluyó para pagar gastos adicionales para la adecuación de las servidumbres de los servicios públicos afectados por el trazado de la ruta y ajustes en la estación de San Miguelito, según el ingeniero del proyecto, Agustín Arias.
Para el consorcio Línea Dos, formado por la brasileña
Odebrecht y la española FCC Construcciones, es una obra “de mucho beneficio para la ciudad y muestra la voluntad del pueblo panameño de llevarla a cabo de manera efectiva, por lo que es gratificante que nos hayan dejado participar”, dijo a Acan-efe el responsable de producción del conglomerado, José Karamañites.
Agregó que 6,000 trabajadores y más de 100 empresas subcontratistas participaron de los trabajos, “el 95 % panameños y gran parte vecinos de las áreas por donde pasa la ruta”.
“Esta obra es un hito en el contexto latinoamericano por lo difícil del área con una alta densidad de población y tráfico”, explicó.
La línea “se entrega a tiempo, con calidad, al cien por ciento de funcionamiento y segura, tanto en los trenes como en las 16 estaciones, si hay pendientes mínimos son en acabados o materiales que no afectan en nada”, agregó.
Además, el suministro eléctrico está garantizado porque la línea está conectada “a dos proveedores, para que no haya ninguna interrupción”.
La empresa FCC dijo por su parte a Acan-efe que el proyecto de la Línea 2 “incluye la ejecución de patios y talleres que permite el mantenimiento de trenes, y la construcción de una estación que interconecta con la Línea 1, actualmente en servicio”.
Se han incluido además “elementos, escaleras, ascensores, rampas, para personas con capacidad reducida, lo que mejora la accesibilidad” al servicio, añadió la constructora española.
La Línea 2 del Metro “mejorará contundentemente la movilidad urbana” y, sumado al impacto de la Línea 1, inaugurada en 2014, aumentará “la calidad de vida” de al menos medio millón de personas que viven en el sector este de la capital, manifestó a Acan-efe el empresario y experto en logística Carlos Ernesto González.
Al dejar los trabajadores “de tener que salir a las 4 de la mañana a su centro laboral, eso aumenta la productividad” de las empresas, explicó González.
Al gobierno se le recriminó que la obra se adjudicase a un consorcio integrado por Odebrecht, en medio de escándalos de corrupción de la firma.