Sepultan en parroquia a sacerdote asesinado
El religioso fue despedido durante una emotiva ceremonia en la parroquia de Sonzacate. La iglesia catalogó como “sacrilegio” el crimen del padre Cecilio Pérez.
La iglesia San Miguel Arcángel de la ciudad de Sonzacate, en Sonsonate, fue insuficiente para albergar a cientos de personas que asistieron ayer al sepelio del sacerdote José Cecilio Pérez Cruz, quien fue asesinado el sábado anterior en la casa parroquial del cantón San José La Majada, en Juayúa. Familiares, amigos, feligreses y sacerdotes de distintas parroquias del país llegaron desde muy temprano a la iglesia para participar de la misa de cuerpo presente del sacerdote, la cual fue oficiada por el cardenal Gregorio Rosa Chávez, los obispos José Luis Escobar, de San Salvador, y Constantino Barrera, de Sonsonate.
El cortejo fúnebre del sacerdote Pérez salió desde la casa de su familia, en el cantón Sábana San Juan Arriba, del municipio de Nahuizalco, y en caravana de cientos de personas se recorrió la carretera vía Los Naranjos para dirigirse hacia Sonzacate. Ni el sol ni el sofocante calor hicieron desistir a las personas que conocieron al sacerdote de acompañarlo en su último trayecto.
Durante la caminata, que fue de aproximadamente 5 kilómetros, la feligresía y los sacerdotes expresaron su repudio a la violencia que afecta al país.
A medida que fue avanzando la caravana, más religiosos y feligreses se fueron incorporando, hasta llegar
a la iglesia donde fue sepultado el padre Cecilio.
“El pueblo está cansado de tanta violencia, el pueblo siente temor y miedo”, dijo el cardenal Rosa Chávez a los asistentes al funeral.
Monseñor Barrera expresó que los asesinos del padre Cecilio cometieron un “sacrilegio” porque atentaron contra una persona consagrada a Dios.
“La Iglesia lo considera un sacrilegio, no vamos a parar de repudiarlo y rechazamos cualquier tipo de violencia contra gente inocente”, recalcó.
Los obispos y curas de otras diócesis del país se unieron al dolor del pueblo sonsonateco y pidieron que se investigue el crimen del sacerdote.
“Pedimos que se investigue, que se aclare, que se conozca la verdad para que se castigue a los autores materiales y si existen intelectuales, también”, apuntó monseñor Barrera.
El sepelio del padre Cecilio tuvo lugar en el interior de la iglesia de Sonzacate, al costado izquierdo de donde fue sepultado hace varios años el párroco Carlos Borromeo Castillo.
Un hermano del padre Cecilio expresó las gracias por el apoyo que la feligresía y la jerarquía de la Iglesia les brindaron.
“Mi hermano ya no es solo de la familia, ahora es de ustedes, desde ahora será una luz para todos”, dijo a los asistentes.