CANCELACIÓN DEL TPS AFECTA TRÁMITES EN ESTADOS UNIDOS
El efecto dominó también alcanza a los hijos de los tepesianos que nacieron fuera de los Estados Unidos, que están bajo programas migratorios que dependen del estatus de sus padres.
La cancelación del Estatus de Protección Temporal, conocido como TPS por sus siglas en inglés, empieza a surtir efectos negativos para los miles de salvadoreños amparados bajo este programa en Estados Unidos.
Aunque en febrero de este año el Gobierno estadounidense dio una prórroga, que vence el 1.º de enero de 2020, en unas semanas los salvadoreños tendrán que lidiar con varios problemas legales debido a que no podrán renovar sus tarjetas de identificación del TPS.
“Hay estados, como Virginia y Carolina del Norte, en los que no se puede tener una licencia de conducir sin un documento que pruebe que se está legal en el país. Sin el documento (tarjeta del TPS) la comunidad de tepesianos se va a quedar sin licencia de conducir y sin otros documentos importantes, en estados donde no se pueden obtener sin probar el estatus legal”, explica Arnoldo Díaz, director de la Alianza Nacional TPS, en Washington D. C., Estados Unidos.
La licencia de conducir es solo uno de los documentos que no podrán refrendar los salvadoreños. Además, los tepesianos no podrán renovar sus tarjetas de identificación personal, que es el equivalente al DUI en Estados Unidos, y tampoco podrán renovar los seguros médicos ni de vivienda o de vehículos que poseen.
“En el caso de las tarjetas de identificación y de las licencias de conducir, el DMV (Departamento de Vehículos Motores) está diciendo tácitamente: ‘No vamos a renovar licencias si no tiene los documentos necesarios para hacerlo’. Y uno de ellos es donde se valida su estadía legal en el país”, dice el abogado de migración Roberto Sarmientos.
Los tepesianos también enfrentarán problemas con los permisos de trabajo. Algunos empleadores ya están advirtiendo que con la tarjeta vencida las empresas no pueden mantener o renovar los mismos contratos que hasta ahora tienen.
“El permiso de trabajo expira en plástico (la tarjeta) en septiembre de 2019. Con base en el memorándum que pasaron las cortes, únicamente lo validarán en papel para cuestiones de trabajo o laboral y para efectos de ‘taxes’ hasta 2020, pero para algunos empleadores el papel no es un documento formal”, continúa Sarmientos.
A mediano plazo, los efectos negativos también impactan en la banca estadounidense y en la economía. El 30 % de los tepesianos salvadoreños son dueños de negocios en Estados Unidos. Sin renovación de seguros de viviendas, las inversiones en las hipotecas de casas o propiedades de los tepesianos también están en riesgo.
HIJOS TAMBIÉN AFECTADOS
El efecto dominó de la cancelación del TPS también alcanza a los hijos de los tepesianos que nacieron fuera de los Estados Unidos. Muchos de estos niños y adolescentes están bajo programas migratorios que dependen del estatus de sus padres.
Uno de estos es el Programa de Menores Centroamericanos, conocido como CAM por sus siglas en inglés. El principal requisito para que los menores de edad puedan optar a este beneficio es que los padres o el grupo familiar sea elegible y, sin TPS, automáticamente los padres y las familias dejan de ser elegibles por no poder comprobar que poseen un estatus legal en el país.
“Nos preocupa que también estos niños que están optando o que están en procesos para el programa CAM se verán afectados. Ya hay algunos casos que se han visto afectados, por el vencimiento del TPS y de los documentos que de alguna manera prueban que
los padres de estos niños están de forma legal en el país”, dijo Díaz.
Pocos meses después de que el presidente Donald Trump ordenara, en 2017, la cancelación del TPS para ciudadanos de Honduras, El Salvador y Nicaragua, una jueza de la Corte Federal de San Francisco en California ordenó continuar los procesos migratorios que quedaron pendientes por la decisión presidencial para 2,700 afectados.
Sin embargo, hay otros cientos de niños que aguardan procesos o que sus procesos están pendientes, debido a la cancelación del TPS para sus padres.
GOBIERNO DEBE HACER SU TRABAJO
“Ahora, ¿quién tiene que moverse para ayudar a los salvadoreños con TPS? El Gobierno de El Salvador y no lo está haciendo, porque ¿el presidente Bukele qué dijo? Dijo: ‘Nosotros recibimos a nuestros hermanos de regreso’. Y eso no es una iniciativa real para buscar una solución. Porque si el presidente está esperando que los tepesianos regresen, entonces Estados Unidos va a decirles: ‘Vete de regreso’”, dice el abogado experto en migración.
La opinión de los expertos en migración, la de los tepesianos y de quienes apoyan la causa coincide en que las declaraciones del presidente no ayudan a la búsqueda de soluciones al problema que tienen los tepesianos.
“Decir que El Salvador está preparado para recibir a medio millón de personas y a sus hijos no es cierto. El país no tiene las condiciones para recibir a todas estas personas. Que el presidente diga que existen las condiciones tampoco es prudente para el trabajo que se ha estado realizando todo este tiempo”, continúa el director de Alianza Nacional TPS.
De acuerdo con miembros de la Alianza TPS, cuando la canciller Alexandra Hill Tinoco visitó Washington en julio le solicitaron una reunión para abordar el tema. Pero en el breve encuentro que sostuvieron no se tocó el problema de los tepesianos y tampoco hubo compromiso para reunirse con los miembros del grupo o con los beneficiarios del TPS.
Al respecto, se solicitó a la Cancillería de El Salvador información sobre la visita de la canciller Hill Tinoco y sobre el tema TPS. Al cierre de esta nota no hubo respuesta por parte de la oficina gubernamental.